Ni el 'Tratado de Versalles', ni la 'Paz de Westfalia'. El año que viene, futuros estudiantes de segundo de bachillerato, en el examen de selectividad de historia cae este alto al fuego entre el 'clan de los Suescun', del que ahora forma parte Kiko Jiménez, y los de Ortega Cano. Un pacto que protegería a Gloria Camila de las discusiones sobre extensiones con Sofía en los platós.
🥊 ROUND 1 | Gloria Camila, a Sofía: "Ahora es la hermanísima" #Supervivientes2020 pic.twitter.com/rRLMcYTxfI
— Supervivientes (@Supervivientes) February 28, 2020
🥊 ROUND 5 | Sofía, a Gloria Camila: "Nunca superará que le quité a Kiko" #Supervivientes2020 pic.twitter.com/MF9BVd5PiP
— Supervivientes (@Supervivientes) February 28, 2020
Kiko y Sofía Suescun han protagonizado un posado para la portada de Lecturas algo low cost. Será que, después del robo, la hija de Maite Galdeano se conforma con poquita cosa. Estarán muy unidos pero, como siempre, cada uno con su tema. El ex de Gloria Camila dice que ahora no quiere guerra con la que fue su familia política. Vaya, que igual les invita a tomar café y unas pastas, ¡viva la diplomacia!
"Si nos mantenemos en ese pacto de no agresión que hicimos Ortega Cano y yo, la retiraré en el acto de conciliación", decía Kiko. Parece que alguien se ha hecho un maratón de 'Juego de Tronos' en la cuarentena y se ha motivado un poquito con la jerga bélica. Si José Ortega Cano se sienta el trono, se tendrá que poner un cojincito para estar más tieso, y es que ya está más para la cadera de titanio que para el 'trono de hierro', el pobretico. Eso sí, Ana María Aldón está jovencísima con su look de Ana Torroja trapera.
Continuamos con Kiko Jiménez Galdós en los 'Episodios nacionales' cuando se enteró por terceros que el diestro quería demandarle. Teléfono en mano, le amenazó diciendo: “si vamos a empezar una guerra, avísame porque sé muchas cosas y si me vas a intimidar con una demanda no tengo ningún miedo". Este no ha visto un pacto de paz en su vida, 'Juhulio' (como diría Joaquín del Betis). Según Kiko, ahí llegó el momento de apaciguar las aguas, aunque yo lo llamaría coacción, pero cada uno le pone a su perro el collar que quiere.
Con lo que parece no querer romper su pacto es con su culito, al que, cada vez que puede, hace un homenaje en las redes, también compatible con una foto tórrida con Sofía, de esas que, si te pillan sin aire acondicionado, te puedes poner más tonto/a que una canción de Mecano. ¡Luego se quejarán de que les roban archivos íntimos!