La reportera más polémica de Telecinco ha decidido pronunciarse sobre la operación que le cambió la cara, y la vida. Tras hacerse público su romance con Antonio David Flores, salió a la luz uno de los secretos de Marta Riesco: tiene una nariz de pega. Sí señor, su es tan falsa como los pechos de la Pombo o los labios de López Álamo.
Días después de pisar las instalaciones de Telecinco por primera vez, la supuesta churri de 'El Penas' recurrió a la medicina estética para poner remedio a su rostro. Tal y como ha explicado a través de Instagram, decidió cambiar de nariz cuando se vio en televisión. Eso sí, el complejo de 'narizotas' lo arrastraba desde años atrás.
Cuando era adolescente, las típicas malotas del instituto se burlaron del tamaño de su nariz, y fue entonces cuando comenzó el trauma de Martita. A raíz de aquel momento, la reportera de tiraba horas frente al espejo maldiciendo su propia tocha, pero a la mañana siguiente, su eterna compañera seguía ahí, en el centro de su cara.
Años más tarde, cuando comenzó a currar en Mediaset, dio el paso de operarse. Lo hizo con el Doctor Juan Peñas, un reconocido cirujano estético, y el resultado fue todo un éxito. En cuestión de 20 minutos, Martita eliminó su complejo y pudo ser feliz el resto de sus días. Eso sí, puede que con su antigua napia Antonio David no se hubiese fijado en ella, lo que habría evitado la crisis personal en la que se encuentra en este momento. ¡Já!