Señoras y señores, ya tardaba el francés más gamberro de la tele en volver a nuestras pantallas. Tom Brusse se ha plantado en 'Secret Story' para meter un poco de caquita en la relación de Sandra Pica y Julen de la Guerra, y aunque se le ha visto un poco el plumero, ha conseguido sembrar la duda sobre las verdaderas intenciones de ex viceverso con la concursante.
Ha sido llegar y besar el Santo, como diría mi abuela. Tom se ha tirado unos cuantos meses fuera de España por motivos laborales. Primero visitó Marruecos para echar un ojo a su hotel, y después, puso rumbo a Francia para protagonizar un nuevo reality. Una vez finalizada la grabación, Brusse ha regresado a Telecinco para liarla parda.
De golpe y porrazo, Sandra Pica se ha topado con su ex novio en la casa de los secretos. Primero ha flipado en colores y después ha intentado evitar cualquier contacto, algo que al final ha resultado imposible. Después de un buen rato mordiéndose la lengua, los ex tortolitos han comenzado la batalla de reproches.
Sandra, acompañada por Julen, ha tenido que escuchar varias pullitas por parte de su ex: "Lo estás haciendo bien, pero estás demasiado pegada a él (Julen) y te apaga", ha dicho Tom. La ex tentadora, muy segura de su relación, no ha dudado en contestar: "A mí tu consejo no me importa. Para tí lo único que está bien es hacer show".
A todo esto, Julen se mantenía inerte junto a su chica mientras escuchaba los reproches del francés. Pero la tranquilidad le ha durado bien poquito. Según ha relatado Tom, el concursante se acercó a Sandra cuando él estaba en 'Supervivientes' para asegurarse un hueco en la casa de los secretos.
Ante estas afirmaciones, Julen simplemente ha dicho: "Tío, cuando quieras echamos una consola". Vamos, que al muchacho se la repanpinfla lo que pueda decir el marroquí. ¿Dormirá esta noche en el sofá por no haber sacado la cara por su chorba? ¡Já!