Anabel Pantoja ha vivido su tarde más complicada en el plató de 'Sálvame'. Ayer se hacía pública su ruptura con Omar Sánchez tan solo cuatro meses después de su paso por el altar (o por la arena, en este caso), y hoy, la sobrinísima se ha sentado en Telecinco para explicar con pelos y señales lo sucedido. Y efectivamente, pare sorpresa de todos, Anabéh y su negro han puesto punto y final a su matrimonio.
Con rostro serio y sin poder evitar las lágrimas, Anabel Pantoja se ha enfrentado a su jornada más intensa. La pobre muchahca se ha tirado media tarde a lágrima viva, y lo que es peor, no tiene pinta de haber cobrado un plus por dramatismo. Las cuatro horas de programa han estado dedicadas a la separación de la sobrinísima y el surfero canario.
Cuatro años de noviazgo y cuatro meses de matrimonio, en eso se resume la relación de la Pantojita y Omar. Visiblemente dolida, la colaboradora ha explicado cómo han transcurrido los hechos: "Para mí ha sido un shock. Llevo aquí dos semanas (en el programa de las frutas) y he sido una coraza. Nadie se ha dado cuenta", aseguraba.
Pese a los rumores de infidelidad, Anabel ha asegurado que no existe una tercera persona por ninguna de de las partes. Además, ha admitido que fue ella la que dio el paso: "He sido dicho yo quien ha tomado la decisión. Él lo está pasando mal... y yo vivo lo mío".
Omar y Anabel: crónica de una ruptura anunciada
Pero, ¿cuándo empezó la crisis? ¿Por qué se casaron si la cosa no funcionaba? Según la Pantojita, el declive comenzó cuando Omar decidió participar en 'Supervivientes': "Cuando él volvió la relación estaba muy dormida y yo necesitaba que se moviera todo. Él llegó con nuevas amistades y con nuevos proyectos profesionales". A partir de entonces, todo fue a peor: "No llegamos bien a la boda, yo estaba a un 60%. Él no lo notó porque yo me excusaba. No se lo dije a nadie", ha dicho Anabel.
Después del enlace, la relación estaba tan fría como el corazón de Laura Fa, considerada como el peor ser humano 'Sálvame' por su falta de empatía. Aunque intentaron recuperar la chispa, fue imposible: "Él estaba muy tranquilo y muy relajado y yo me distancié. Lo hablamos, intentamos arreglarlo. Hablamos de por qué ya no nos abrazábamos casi, siempre estábamos mirando el móvil, él no salía conmigo a cumpleaños y otros actos... Yo detectaba señales de aburrimiento, teníamos mundos y proyectos distintos", relataba la 'influencer' visiblemente emocionada.
En todo momento, Anabel ha querido dejar claro que Adora a Omar y jamás tendría una mala palabra sobre el que ha sido su compañero de vida durante los últimos años: "No olvido todo lo que él ha hecho por mí, me he sentido querida, amada, deseada, admirada... Y yo se lo agradecí el día de la boda. Pero a mí se me fue el amor", asegura.