Atención lectores, poned un buen temazo de Céline Dion y comprad reservas de 'Kleenex' porque se ha confirmado la ruptura de una de las parejitas más consolidadas del panorama nacional. Tamara Gorro y Ezequiel Garay han dicho hasta nunqui a su matrimonio.
Tras doce añitos de amor y dos retoños en común, la colaboradora de televisión y el futbolista han decidido tirar por caminos puestos pero viviendo bajo el mismo techo (cual peliculón de Jennifer Aniston).
Tamara ha utilizado su cuenta de Instagram como rueda de prensa particular y le ha contado a sus miles de followers el motivo de su inesperado regreso a la soltería: "Yo siempre he dicho que no somos un matrimonio perfecto, pero llegó un momento que te estancas como pareja y tienes dos opciones: o continuar y terminar con un desgaste que no tenga solución, o continuar porque hay amor. Hemos decidido tomar un descanso con la fe y esperanza de continuar juntos".
La influencer ha confesado que lleva separada de Ezequiel algunos meses pero ha decidido soltar el bombazo ahora para adelantarse a los futuros dimes y diretes y no ser blanco fijo de los programas telecinqueros sedientos de salseo: "Evidentemente, se van a proceder a dar pasos porque nos vamos a separar. Eso implica que tengamos que estar en diferentes casas y no quiero alimentar rumores".
Eso sí, Tamara ha querido tranquilizar a sus fans (que ya estaban rozando el ataquito de ansiedad) y ha desvelado que esta separación tiene como principal objetivo que los ex churris vuelvan a reencontrarse con más fuerza que nunca: "He tomado la decisión más adecuada, que es coger un poco de aire e intentar caminar juntos de nuevo".
Si Jennifer López ha vuelto con Ben Affleck después de casi 20 años, tenemos la esperanza de que Tamara, Ezequiel & Cía nos vuelvan a bridar con vídeos de lo más bailongos frente al espejito de su baño más pronto que tarde.