Tamara Falcó lleva unos días desaparecida. Tras ser acusada de ser una niña pija, homófoba y retrógrada, la marquesa de Griñón dio la cara en 'El Hormiguero' y explicó (mu' malamente) que todo había sido un malentendido. Las críticas hacia su persona no cesaron, y ella, tan creyente como siempre ha demostrado, se marchó a Lourdes junto a su cuadrilla cristiana.
La religión es el punto de apoyo de Tamara. Su vida gira entorno a Dios y no duda en ponerse en sus manos cada vez que tiene un problema. Ahora, sin marido y con la opinión pública en su contra, la Falcó parece haber peregrinado hasta Lourdes para conseguir el milagro: frenar la polémica y volver a ser la reina de corazones.
Más allá de que se cumpla o no su deseo, lo cierto es que Tamara debe seguir ganándose el pan y volverá al curro en cuestión de días. Concretamente, la última semana se noviembre acudirá a uno de los eventos más significativos: la inauguración de una nueva tienda de Porcelanosa en Madrid.
Tamara Falcó - Gtres
Allí tendrá posar, se enfrentará a las preguntas de la prensa y, tal y como publica Informalia, la marquesa podría estar preparando ya su discurso. Tamara necesita lavar su imagen, convencer al público de que ella también es una mujer actual, tolerante y abierta. Por el bien de la marca a la que representa, deberá estudiarse un buen sermón para no cometer imprudencias.