Señoras y señores, es real. El día ha llegado. Tras varioes meses de rumores y habladurías, Tamara Falcó e Íñigo Onieva han confirmado que pasarán por el altar. Y lo más importante: la hija de la Preysler nos ha enseñado el original pedrolo que le ha regalado su churri.
Cuando creíamos que la Falcó se iba a quedar para vestir Santos, llegó Onieva y cambió todo. La vida de Tamara dio un giro radical, y así lo ha recordado ella en su 'post' nupcial: "Antes de conocerte @ionieva me sentía completa y contenta pero fue cruzarnos y que mi vida diera un giro a mejor, totalmente inesperado".
El amor llamó a su puerta cuando ni siquiera lo buscaba, y de golpe y porrazo, aquel apuesto maromo llamado Íñigo se convirtió en su compañero de aventuras: "¡Que locura! pero como diría una sabia mujer: es una locura de Amor… y como también dice San Pablo, en su carta a los Corintios: al final, en la vida lo único que importa es el Amor.", escribe Tamara.
"Gracias, por proponerme ser tu compañera de por vida. Me siento la mujer más afortunada del planeta y el sí que te di te lo repito y te lo dejo por escrito para que no se te olvide jamás", acaba diciendo la Falcó en su última publicación.
Además, la colaboradora de 'El Homiguero' ha mostrado el particular pedrolo con el que su chorbo le ha pedido matrimonio. No se trata de una sortija común. Parecen tres diamantes separados entre sí, unidos tan solo por el dedo de Tamara.
En cuanto a la celebración, todavía se desconoce la fecha. El banquete, casi con seguridad, tendrá lugar en El Rincon, el palacio que Tamara heredó de su padre cuando este falleció.