Aquí comienza, 'Sálvame Granada' (pero no la fruta, sino el explosivo). Quién nos iba a decir que el auténtico Vietnam del programa diario está en la calle, en el epicentro del salseo, entre los reporteros... Ahora, además de su largo bagaje en televisión, pueden añadir a sus currículums que también han sido corresponsales de guerra (de las suyas propias, claro).
¡Pues Sergi Ferré! ¡Uno de ellos! El más polioperado de los cuatro y enemigo íntimo de Kiko Jiménez ha destapado la mala relación y las alianzas que existen entre los cazafamosos a raíz de las selectas invitaciones a la boda de José Antonio León, celebrada el pasado fin de semana.
Según Sergi, los reporteros no sólo cogen la alcachofa con maestría, sino que también se las tocan entre ellos: "José Antonio está últimamente muy arriba, pero muy, muy arriba. Algunos compañeros le llaman 'la estrellita. Me hizo un favor cuando dejó de seguirme, es un coñazo con las fotos con su chica", comenzaba diciendo hace unos días en 'Sálvame' desprecintando una nueva trama para los días de verano vacíos de contenido que se nos vienen encima.
Sergi Ferré
Ferré(ro) Poché ha continuado dando a entender que los de la cúpula de 'La Fábrica de la Tele' están perdiendo dinero no abordando la milicia entre los compañeros menos famosos de 'Sálvame', pidiendo que recuperen un 'Sálvame Okupa' con los corresponsales del cancaneo en los distintos puntos de España:
"Tendrían para siete temporadas, porque nos matamos. Por ejemplo, cada vez que hay que coordinar las vacaciones, nos matamos, porque sale lo peor de cada uno, somos incapaces de ponernos de acuerdo por las buenas", aseguraba Sergi Ferré, que ahora comprendemos por qué motivo se llevaba tan bien con Maite Galdeano: son igual de liantas.
Sergi Ferré ha calificado a Omar Suárez, José Antonio León y a Kike Calleja de "intransigentes", una forma amable y leída de decir que son mini-dictadores de corto alcance en la redacción de 'Sálvame'. De hecho, ha dejado claro que no existe entre ellos "una relación de amistad, solo de trabajo" asegurando que nunca se ha tomado nada con ellos, ni siquiera un descanso. ¡Qué ácido todo! ¡Aquí hay limón en cantidades industriales!
José Antonio León y Kike Calleja, grandes aliados
Kiko Matamoros inicia una petición de amistad a Kike Calleja y José Antonio después de perder su trimachito con la salida de Antonio David Flores y la nueva etapa 'más suave que un guante' de Rafa Mora tras su cese semanal del programa
Al contrario de lo que ha defendido Sergi Ferré estreñido de furia por no haber estado invitado en la boda de su compi pelocos, lo cierto es que entre José Antonio León y Kike Calleja, el fucker del que se ha dicho que se ha metido en la alcoba con la mitad de las maduritas de Telecinco (rumorología pura y dura, como cuando se le relacionó con Terelu), sí que existe un vínculo de amistad nivel "yo soy tu picha y tú eres mi bro".
Si no vimos al primo marujón de Jesús Calleja (a Kike) en la boda de José Antonio fue porque le adelantaron sus vacaciones a las Maldivas que tenía planeadas junto a su churri desde hace tiempo. Aunque la idea inestable de boda por el covid (cambiaron ochocientas mil veces de planes en función de la situación sanitaria) tampoco contribuyó a que finalmente Kike pudiera acudir al enlace de su amigo con Rocío Madrid: "le he hecho un buen regalo porque quiero mucho a Jose Antonio y a Rocío, no creo que Kiko Matamoros pueda decir lo mismo", defendía él mismo cuando el Don Limpio de 'Sálvame' le recriminó su ausencia en la boda de León.
Zippi y Zappe
José Antonio León, el gemelier de Juan Ibáñez (la hormiga de 'El Hormiguero'), aprovechó que Kike Calleja justificó en directo su fila 0 en la boda para compartir con la audiencia que consideraba a su compañero "un hermano" mientras que el grafista recordaba que los profesionales de la alcachofa habían compartido varios viajes y vacaciones juntos.
Omar Suárez, el más unido a las colaboradoras
Omar Suárez, el entrevistador más simpaticón de la revista 'Lecturas', también ha sido nombrado por el inmolador de Sergi Ferré.
El más sonriente de los reporteros dicharacheros de 'Sálvame' siempre ha presumido de una fantástica relación con sus compañeras Belén Esteban, María Patiño, Gema López y compañía, hasta que hace unas semanas protagonizó uno de los planes 'B' de 'Sálvame' para cubrir espacios muertos del programa, esos que sacan del cajón desastre cuando la Pantoja está más parada que la vacunación en España y ya se han analizado minuto por minuto todas las intervenciones de Rocío Carrasco y que está lleno de trapitos sucios (aunque monísimos de la muerte, perfectos para combinar con cardado rubio o peluca) de Lydia Lozano.
El pasado 28 de abril David Valldeperas aseguraba vía pinganillo que Lydia había perdido muchos amigos en el programa por culpa de la cuenta de Twitter de su club de fans, concretamente a uno del equipo del programa donde trabajan. La madre del chuminerismo se quedó anonadada, patidifusa, turuleta al comprobar que la majadería del programa podría seguir recovecoeando hasta límites insospechados de su intimidad.
JorgeJa lanzó como pista al más puro estilo 'Mask Enemiguer' que la persona a la que Valldeperas se refería asistió a su boda con Charly. Fue entonces cuando, con muy poca fortuna, la colaboradora empezó a hacer cabos erróneamente señalando a Omar Suárez, provocando el efecto 'Lydia Troyano' contra su examigo el reportero dicharachero:
"No volvería a invitarlo a mi boda, de hecho, a mis últimas fiestas ya no ha venido, pero sigue siendo mi amigo y sigue teniendo relación con mis amigos", comentaba la Lozana olvidando que el corresponsal del salseo en la calle pasa de ser un personaje, solo quiere trabajar y que le dejen tranquilo, como todos los excolaboradores que han protagonizado la fuga de cerebros hacia 'Viva la Vida' y el 'Fresh' de Sonsoles Ónega.
Según Lydia, el origen del conflicto no es otro que haberle negado una entrevista a Omar para la revista 'Lecturas', donde ejerce como pluriempleado el reportero. Algo que sentó muy mal a Suárez, pero que Lozano quiso arreglar concediéndole una portada durante la cuarentena: "Nuestra relación ya no es la misma, pero seguimos siendo amigos", relataba.
Omar se encontraba por aquel entonces en Barcelona cubriendo una información de Antonia Dell'Atte. Al ser consciente de que Lydia Lozano lo había puesto en la palestra de los contenidos ruineros del programa para el que trabaja, el periodista reaccionó como si su compañera le acabara de clavar tres puñales (uno de limón, uno de naranja y otro de tomate) por la espalda:
“¿Pero cómo ha surgido esto? Me alucina porque yo jamás he contado nada de ningún compañero. Que alguien me explique por qué Lydia me mete”, comentaba argumentando cuál fue el origen de su distanciamiento con la colaboradora, coincidiendo en gran parte de lo contado por ella.
