Tras pasar el Covid, Jorge Javier guarda reposo en su impresionante chalet de la capital. Necesita recuperar sus cuerdas vocales para retomar su labor en Telecinco, y el médico le recomendó un método infalible: cerrar el pico, confinarse en casa y no pasarse con el aire acondicionado. Ha sido justo ahora, en este impás forzoso del presentador, cuando se ha producido el encuentro más comentado de las últimas horas.
Rocío Carrasco, preocupada por la salud de su recién adorado JorgeJa, se ha pasado por la casa del presentador para brindarle su apoyo. No sabemos si Rociíto y el de Badalona se han pimplado un botellón de champán, una mariscada o quizás un buen asado. Lo que sí sabemos, con seguridad, es que se lo han pasado pipa cotorreando como dos jubiladas a la salida de la iglesia.
A juzgar por la imagen ha compartido Jorgito, todo apunta a que podrían haberse dado un chapuzón para sobrellevar las altísimas temperaturas. Rocío parece llevar un bikini y luce su cabello al natural, despeinado. Vázquez, algo más coqueto, posa con sonrisa sin dientes, camiseta ajustada y cejitas depiladas.
Existen comentarios de todo tipo acerca del posado, pero lo más impactante ha sido la reacción de Rocío Flores. Poco después de que el comunicador publicase la imagen, ella colgaba una foto en 'stories' declarándose ante su hermano David: "Amor de mi vida", escribía. Tal y como apuntan algunos, este gesto de la hija de AntonioDá podría ser un dardazo para Rociíto, que acude a visitar a Jorge pero no hace lo mismo con su retoño.
Rocío Flores junto a David Flores - Instagram