La Carrasco y su maridín se han montado una juerga al más puro estilo de la Lozano. El pasado lunes, día 25 de julio y festivo en Madrid, la hija de 'la más grande' quiso reconocer el trabajo bien hecho de sus compis de 'La Fábrica de la tele', esos que aguantaron sus lágrimas durante la grabación de 'Rocío: contar la verdad para seguir viva' y 'En el nombre de Rocío'.
La pelirroja y su chorbo abrieron las puertas de su casa, compraron chuletillas, choricillos, panceta, y dieron comienzo al fiestón del momento. Hasta la vivienda de la Carrasco acudió prácticamente todo el equipo que ha trabajado con ella en su docudramón: cámaras, redactores, técnicos, reparte-clínex y hasta algún jefazo de la productora.
Tal y como publica Informalia, los invitados de Rociíto disfrutaron de un maravilloso día de piscina privada, barbacoa, cervecitas y, con toda seguridad, más de uno se tomó algún gintonic al final de la tarde. ¿El objetivo de la celebración? Dar por finalizada una etapa, agradecer el trabajo de muchos y comenzar el descanso oficial de Rociíto.
Sí señor. Al parecer, la Carrasco hará un parón en su trayectoria televisiva. Una vez finalizada la grabación de 'En el nombre de Rocío' y después de haber participado en varios 'shows' organizados por 'Sálvame', la pelirroja se retira unos meses del foco mediático para centrarse en el resto de sus obligaciones profesionales. O, quién sabe, puede que aproveche esta crisis para pillarse una chocita en Chipiona y comience su nueva vida en el pueblo de su madre.