Pese al "buenrrollismo" que aparentan tener Rocío Carrasco y Jorge Javier Vázquez, parece que todo cambia cuando se apagan las cámaras. En directo todo es bonito y maravilloso. Ambos se adoran, se veneran y comparten todo tipo de piropos. Pero nada más lejos de la realidad. En el día a día no comparten ni una mísera comida.
Aunque Jorgido no ha dudado en deshacerse en halagos con la Carrasco durante los últimos meses, todo apunta a que sus adulaciones no han servido de mucho. Él quería convertir a Rociíto en su 'best friend'. Ya podía imaginar sus paseos de la mano por Madrid o algún viaje juntos al otro lado del planeta para después posturear en Instagram. Pero de eso nada, monada.
Él insiste, pero Rocío no responde. Desde hace un tiempo, es el propio Jorge quien la ha invitado en numerosas ocasiones, delante y detrás de las cámaras, a pasar una tarde agradable en el teatro Reina Victoria. Allí es donde Vázquez se ha tirado todo un mes con su obra, 'Desmontando a Séneca', y la Carrasco no se ha dignado a acudir.
En público aceptó la propuesta, pero con la boca pequeña. Y como era de esperar, no apareció por la sala. "Me voy a a ir de Madrid y Rocío Carrasco sin venir", dijo el comunicador en la puerta del teatro. Mientras tanto, la pelirroja más famosa de la tele podría estar repanchigada en el sofá de su casa viendo Netflix. ¡Já!