La imagen Escanes ha cambiado de manera radical en los últimos años. La conocimos al natural. Sin retoques, filtros ni maquillajes de película. Era una niña rubia, de rostro dulce y sonrisa enternecedora. Sin embargo, todo cambió cuando le presentaron a su nuevo mejor amigo: el ácido hialurónico.
La 'instagrammer' ha caído en la misma trampa en la que caen todo aquellos que pasan demasiado tiempo en Telecinco. De pronto, una necesidad incontrolable por aumentar el tamaño de sus labios, eliminar arruguitas o estirarse el ojo aflora sin piedad. Y entonces no hay vuelta atrás. Todo el que prueba se engancha, y Escanes ya es adicta.
No hay más que comparar un par de fotos suyas para darse cuenta del cambio. La joven ha retocado sus labios en varias ocasiones, luce más pómulo y utiliza una cantidad ingente de maquillaje. Antes lucía sencillita, y ahora roza la sobrecarga. Ha pasado del clásico al barroco en un abrir y cerrar de ojos, pero no la culpamos por ello.
El antes y después de Laura Escanes - collage poprosa
Laura es otra víctima más del espejo. Otra 'instagrammer' que ha caído en las garras del retoque constante y el deporte diario. A través de las redes, suele mostrar sus entrenamientos, las visitas a su clínica de confianza y los maquillajes imposibles que luce en cada evento.
Laura Escanes junto a Risto Mejide antes de pasar por boxes - Gtres