Rocío Carrasco se sentaba anoche en Telecinco para presentar el quinto episodio de su polémica docuserie. Tras una breve introducción, la cadena de Vasile emitía, sin paños calientes, lo que resultó ser un claro discurso contra Ortega Cano. La hija de la Jurado habló alto y claro sobre la relación de la cantante y el torero, y fue este último quien salió corneado.
Al parecer, Ortega no fue el marido ideal. Durante años, el diestro no se portó como debía con su esposa, que terminó hasta la peineta de aguantar sus "compañías", tal y como aseguró Paloma García-Pelayo: "No le gustaba el comportamiento que tenía Ortega Cano; no le gustaba el uso que hacía de la casa, no le gustaban los amigos y amigas que invitaba".
Pero, ¿a qué clase de amistades se refiere la periodista? A juzgar por el tono que emplean tanto ella como Rociíto, todo apunta a que Ortega hacía lo que cualquier mujer casada jamás hubiera tolerado de su marido. Y no, no lo confirman, pero todo apunta a que el torero se dio a la buena vida durante una temporada, y aquello fue la gota que colmó el vaso.
La Carrasco asegura que su madre quería separarse, pero la enfermedad llegó a su vida y se truncaron todos sus planes. Paloma, aunque desconocía en aquel momento las intenciones de la Jurado, sí que tenía constancia de que "los problemas en el matrimonio eran serios".
"La familia conocía perfectamente los últimos años en los que había conflictos, conflictos que eran… eran conflictos muy importantes y muy sonoros", decía Pelayo sobre los problemas de pareja que arrastraban Ortega y la cantante.