Manuel Bedmar se ha dejado un riñón en su último caprichito. Con el precio del carburante por las nubes y las sandías a 8 lereles en los supermercados, el churri de Rocío Flores ha creído adecuado gastarse la friolera de 12.400 euros en un antojo en toda regla. Aunque desconocemos cómo es la economía del chaval, todo apunta a que la hija de la Carrasco podría haber colaborado e la "inversión".
Saltó a la fama cuando su amante, Laura Gutiérrez, se hizo un 'Deluxe' rajando largo y tendido sobre la relación que mantuvieron. Al parecer, Manuel y su amiguísima mantenían relaciones a espaldas de Rocío Flores, y esta, aunque acabó descubriendo el pastel, decidió perdonar a su chico. Tanto es así que, ahora, Ro podría haberle prestado algo de pasta para su último capricho.
Bedmar se ha pillado una Yamaha TXMAX 560, tal y como publica La Razón. O lo que es lo mismo, el muchacho se ha gastado un pastón en una moto que ni siquiera es bonita. Se trata de un modelo líder en ventas en toda Europa, lo que demostraría que es una moto cómoda, funcional y de ciudad. Bedmar, al parecer, es adicto a sortear los coches para ponerse el primero en el semáforo.
Sí señor, al chorbo de la hija de AntonioDá le gustan las motos y ha vendido la anterior para comprarse esta. "Llegó la hora de decirte adiós, pero te dejo en buenas manos", escribe en Instagram junto a una fotografía de su antigua compañera de aventuras.