Todo comenzó con una llamada. Marta Riesco aseguró en 'Ya son las Ocho' haber charlado a través del teléfono con Rocío Carrasco, y esta, lejos de confirmarlo, visitó el plató de 'Sálvame' para llamar "mentirosa" a la reportera. A partir de aquel momento, el programa de las frutas ha aprovechado cada minuto de directo para rajar largo y tendido sobre la churri de Antonio David. Jorge Javier, incluso, llegó a pedir su despido.
'Sálvame' ha encontrado a su gallina de los huevos oro. Marta Riesco funciona ante la audiencia. La guerra entre la periodista y Rocío Carrasco es la comidilla en las calles, en las tiendas y, si te descuidas, hasta en el Congreso. En España no se habla de otra cosa, y desde 'La Fábrica de la Tele' solo tienen un objetivo: explotar el tema al máximo y recuperar el tirón mediático que habían perdido.
Pero la cosa se está poniendo chunga. Marta no puede más. Dice sentirse "acosada" por la productora que despidió a su churri y, a través de Instagram, ha solicitado ayuda policial: "Pido por favor a la Policía Nacional que me ayude con la campaña de acoso que me está haciendo 'La Fábrica de la Tele'. Estoy en tratamiento por su culpa y ahora me encuentro en el hotel con un ataque de ansiedad y sin estar con los míos. Tomen medidas ya".
Marta Riesco pide ayuda policial a través de Instagram
"Han pedido mi despido. Han publicado mi número de teléfono en redes. Me han insultado. Se han metido con mis defectos físicos. Están maltratándome mesiánicamente hasta unos límites insospechados. Solo soy una periodista que ha contado una noticia", escribe Marta, desesperada, en uno de sus 'stories'.
"Tenéis que actuar ya porque me están volviendo loca. Estoy con antidepresivos desde que empezaron con el acoso hacia mi. No hay cuerpo que aguante esto", asegura la reportera en otra de sus publicaciones, y menciona de nuevo a la Policía.