La conocimos en 'GH VIP' y se hizo unos cuantos 'Deluxe' poniendo a caldo a Makoke. Era la etapa rebelde de Laura. Culpaba a su madrastra de todos sus males y, a base de confesionarios plagados de lágrimas, se llevó el maletín de Guadalix. Se convirtió en una verdadera estrella en Telecinco y su perfil atrapó miles de jovenzuelas. Y fueron ellas, las jovenzuelas, quienes propiciaron su salida de la tele.
El éxito de Laura era tal que no tardó en facturar grandes cantidades gracias a Instagram. Empezó con pequeños anuncios, después fue imagen de varias marcas y ahora es todo un referente en la red. Fue Dulceida quien la fichó y entonces se produjo el cambio. Laura descubrió el chollo de ser 'influencer' y dejó la tele para dedicarse al postureo más puro.
Tras varios años dedicada en cuerpo y alma a sus redes, la hija de Kiko Matamoros regrese a la tele. Y no, no es para hablar de guerras familiares ni nada por el estilo. Desde la productora de Ana Rosa Quintana la han fichado para poner en marcha su propia sección sobre moda, dietas y consejos de belleza. Es decir, un apartado en el que Laura acercará el mundo de las redes al de la televisión.
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Con más de un millón de seguidores en Instagram, Laura llega a Telecinco en forma de apuesta segura. Si un tercio de sus fans encienden la tele cada semana para verla, los datos de audiencia de 'Vamos a ver' no serían nada malos. Es decir, Laura podría ser un empujón importante para el funcionamiento del nuevo programa presentado por Joaquín Prat.
Fotos: Telecinco