La Casa Fuerte ha emprendido su recta final y, con ello, un cambio de mecánica cuando aún no habíamos comprendido la anterior. Así han comenzado con las expulsiones. Las parejas afortunadas de poder dejar de escuchar la irritante vox de Oriana han sido Maria Jesús y Juani, su madre; y Macarena y Labrador, con su nuevo look de Don Limpio.
La novia de Rafa Mora y el tete de Gandía Shore han sido los protagonistas máximos, y es que Labrador tenía una cuenta pendiente con el novio de su compañera, Rafa Mora, un niño orgulloso de sus notas ¡qué ha aprobado selectividad! Y algunos pensando que no sabía ni escribir...
Ladraron, se echaron cosas en cara hasta apareció una septuagenaria de mechas rosas, a lo Roberta de Rebelde, que dice llamarse Pilar Yuste a la que Labrador, el hombre que quería entrenar su cerebro y su miembro viril a partes iguales (dicho en Gandía Shore), le recriminó haberse agenciado su dinero cuando era su representante. Igual, ha entrenado también tanto los huevos que su cabeza se ha convertido en uno.
El cara a cara más esperado: Labrador se enfrenta a sus archienemigos Rafa y Pilar Yuste: "Tú a mi no me vas a insultar más" #SemifinalLCF https://t.co/r0AnqClS6F
— La casa fuerte (@lacasafuerte_tv) July 17, 2020
No me extrañaría, porque llevar la agenda de una leyenda como Labrador debe implicar grandes cantidades de dinero, y de batidos de proteínas. Yuste negó haberle limpiado los bolsillos a Don Limpio y le montó un chicken legendario al ex concursante. Está claro que el valenciano no se calla ni una, hasta llegó a llamar mentirosa a la presentadora por una rabieta durante una prueba.
Vía | Telecinco