Desde que su nuevo temazo conquistase a todo el planeta, Shakira vive en una celebración constante. Los fans se agolpan a diario en su puerta como muestra de cariño, le envían regalos, tartas de cumpleaños y hasta un grupo de mariachis se plantó bajo su ventana para dedicarle una bella melodía. Los gestos de apoyo no cesan y la ex de Piqué ha celebrado por todo lo alto su éxito internacional, algo que parece haber molestado a la que fuera su suegra.
Shakira está encantada con la reacción del público. Sabe que ha ganado la batalla mediática y no ha dudado en festejarlo junto a los suyos. Organizó un fiestón con sus amigas cuando 'Session 53' llegó a la cima, volvió a hacerlo el día de su 46 cumpleaños y también en el de sus niños, Milan y Sasha, que cumplieron años a finales del pasado mes.
El casoplón de Shakira ha retumbado como nunca en los últimos días, y según Informalia, los padres de Gerard están hasta el moño de tanta celebración. Tener como vecina a la ex de su retoño se ha convertido en un verdadero infierno. Están condenados a escuchar la famosa canción cada día, soportan a la prensa a todas horas y, para colmo, la de Barranquilla puso una bruja en su balcón como gesto de burla hacia su suegra.
Un día es soportable, dos también, pero el tercero molesta. Joan y Montserrat viven desesperados por el constante ruido que genera Shakira, e incluso estarían meditando la opción de mudarse durante un tiempo. Su paciencia ha llegado al límite, pero saben que la cantante no tardará en irse a Miami y eso les mantiene esperanzados.