Lydia Lozano debe estar dándose un chute de desfibrilador o echándose un copazo en una palangana después de ver a Albano descabezándose la pipa, bueno, el Girasol. Lo bueno es que, por primera vez, hemos visto a un famoso despeinado al quitarse su casco de disfraz y no como si acabara de salir del centro de belleza de Raquel Mosquera, algo que da cierta verosimilitud al programa que nos ha querido hacer creer que el público ha expulsado, utilizando un Tamagochi estropeado como herramienta de voto, a las dos mejores voces del programa: Al Bano y Pastora Soler.
Increíble lo del 2020, que nos ha traído hasta Al Bano, el Jordi Hurtado de las baladas, cantando 'Despacito' (que es como baja las escaleras, que ya tiene una edad, siempre con el mismo pie y agarrado a la barandilla) y por el gran Freddie Mercury (Alfredo Mercurio, in spanish). ¡Y todo vestido de planta de herbolario! Ojito que el italiano ha cambiado el "gira el mundo gira" por el gira-sol.
La verdad que, por muchas pistas que nos diera el programa que nos ha ayudado a empatizar con Aramís Fuster en eso de no dar ni una, las grandes evidencias que presentaba este famoso enmascarado han sido su acento, más marcado que la licra en cualquiera de nosotros después del confinamiento, y su portentosa voz. Lo teníamos calaíto, quizás porque aquí en España somos más de aceite de oliva virgen extra que de girasol...
"Ha sido una experiencia eccezionale", ha dicho Al Bano queriendo expresar que ha sido excepcional (idiomas, querido, idiomas) su paso por el programa, en el que ha podido participar, tal y como ha expresado él mismo, gracias a que el covid había paralizado algunos de sus proyectos previos, que podrían haber sido incompatibles con disfrazarse de árbol de navidad con gafas de sol.
Muchos son los nombres que han sonado en las quinielas como Georgie Dann o Bigote Arrocet, aunque todos teníamos claro que era más fácil reconocer a Al Bano con la careta puesta que sin ella, ya que es todo un desconocido para el que no sea espectador asiduo de Sálvame o haya nacido después de los Juegos Olímpicos de Barcelona. Tras su expulsión, 'Caniche', 'Cuervo', 'Catrina' y 'Camaleón' se han convertido en los cuatro seres, dignos de las mejores fumadas, que se batirán en la gran final del show más loco de la tele, 'Mask Singer'.
Las pistas de sus vídeos hacían referencia a que era un hombre al que le gustaba mucho reír (por su canción 'Felicità'); que es "muy trabajador y ni a su familia ni a él les gusta zanganear en las camas", algo que no se puede hacer teniendo niños pequeños (los que tiene con Loredana Lecciso, de 9 y 8 años); que es "muy fan de las mujeres" (se ha casado dos veces y es italiano); ganador de premios (el festival de San Remo, entre otros), que es tan amante de la naturaleza que vive rodeado de ella ("en su casa de Cellino produce su propio vino y aceite"); y que "su prenda fetiche es un sombrero blanco", vaya, que es el Amador Mohedano de la Toscana...
Además, como pista extra, Al Bano nos ha sorprendido trayendo esta foto con Kofi Anan, Premio Nobel de la Paz en 2001, bajo el título “Paz y amor y el Plus para el salón nuestro lema”. Una pena que no haya traído, ya que estaba, una fotito con su gran amiguita Lydia Lozano... Bueno, mejor dejemos ese tema para otro día, que se ha quedado muy a gusto cantando tirando de sus envidiables cuerdas vocales el 'Nessun dorma' (mucho mejor que la versión de 'Mariah Carey' que hizo su enemiga la periodista, la verdad).