Hace unos días creímos que por fin se venía cancaneo de garrafón y resaca de salseo de la gorda con el estreno de nuestros tróspidos favoritos de las anteriores ediciones de 'La Isla de las Tentaciones' en acción, su gran retorno. Telecinco emitió dos tandas de estrenos fakes consistentes en 45 minutos de presentaciones de los concursantes (a los que ya conocemos) montadas con el 'Movie Maker' y que, si no hubieran visto nunca la luz, tampoco hubiera pasado nada. Segregamos altas dosis de hype-paína para nada.
Pero esta noche de miércoles (15 de septiembre) por fin han regresado los maratones de mala leche, las cantidades industriales de cornamenta y las fases célebres de los antifilósofos del siglo XXI para iluminar nuestro aburrimiento y renovar nuestro fondo de armario de TikToks. ¡Menudo estreno! No se veía tanta tensión desde el último plano corto que le hicieron a Carmen Lomana en televisión (lo digo por lo estirada que está su cara).
La profe Sandra Barneda ha separado en dos grupos a los integrantes de las cinco parejas que han puesto en peligro su relación desde el minuto uno que han bajado del catamarán y han puesto el pie en esa playa. Por un lado los de Villa Playa, el equipo de los guarretes, que está compuesto por Fani Carbajo, Isaac Torres, Lester, Andrea y Mayka.
Por el otro, el grupo que se va a centrar en exponer un trabajo sobre la composición de las lágrimas que van a derramar cada uno de ellos al ver el concurso de sus parejas. Me refiero al grupo de Villa Montaña compuesto por los dos desconocidos (Roberto y Álex), Lucía la sufridora (que ya ha estado a punto de abandonar al separarse de Lobo), Patri Pérez Iglesias (la casi embarazada pero no) y el pobre Christofer.
Andrea y Óscar se vuelven a ver las caras en la primera hoguera
Al igual que en el careo entre Fani y Julián se podía cortar la tensión con un cuchillo de los que vienen con la ensalada del McDonald's (quién se la pide pudiendo elegir el Mc Aitana), en el reencuentro entre Andreíta y Óscar se ha vuelto a revivir la tensión sexual no resuelta que ya se encargarán ellos de resolver durmiendo en la misma cama, tal y como dicta una de las novedades del programa. ¡Ufff, qué pena! (leer con voz de Ylenia).
He llegado a la conclusión de que esa Palapa del salseo está imantada con una neurociencia que hace olvidar a los concursantes que tienen pareja. Por lo menos, en el caso de Andrea es efectivo ya que, con sólo ver los andares de Óscar Ruiz, ya se le ha puesto la mirada perdida y la sonrisilla tonta propia de una adolescente que acaba de empezar a salir con su novio.
El tentador con contrato de permanencia con la productora de 'La Isla de las Tentaciones' (como si fuera una compañía telefónica) ha hecho su entrada triunfal asegurando tener cuentas pendientes con Andrea Gasca: "Es un placer estar aquí por tercera vez. Ella y yo llevamos dos años, desde que salimos de aquí, con rifirrafes y estoy cansado. Le tengo cariño y no quiero estar toda la vida así", ha comenzado diciendo Mr. Simpatía (si lo comparamos con Julián).
El que ha dejado de parecer un jugador del Levante de segunda división para aproximarse más a la figura del quarterback sin necesidad de usar hombreras ha reconocido que ha visto "muy guapa" a Andrea. Cumplido que ella, por educación (que ella es muy educada), le ha devuelto reconociéndole que le sienta muy bien su nuevo corte de pelo.
Eso sí, del 1 al 10 Andrea le ha dado al malagueño un 6 en belleza para que "tampoco se flipe". Vamos, que les ha faltado tiempo para pelar la pava mientras que el pobre Roberto se cree que a la tercera vez de la princesita va la vencida.
Se sacan un poco de mierda para disimular que están deseando comerse la cara
Conscientes de que están en un programa de televisión y que hay que respetar los tiempos (porque por ellos ya estarían liándose), los omnipresentes en las tentaciones Óscar y Andrea han abierto el cajón de los reproches para hacerse un poco los dignos, pero no mucho.
"Me trae buenos recuerdos, pero también malos como cuando bajaba a Málaga y pasaba de mi cara", ha comenzado diciendo la princesita amante de la leche cuando Sandra le ha preguntado qué ha sentido al ver a Óscar, con el que estuvo saliendo un año tras romper con Ismael (el chico con el que entró en el programa).
El tentador, rápidamente, ha contraatacado recordándole qué sucedió instantes después de que decidiera irse con él en el último episodio de 'LDLT 1': "O cuando te fuiste con Ismael a los 10 minutos de acabar la hoguera final", le ha recriminado el rubiales antes de que la propia Andrea quisiera cortar el intercambio de reproches para volver al mood del tonteo del inicio.
Mal rollito entre Óscar y Mayka
Al igual que ocurrió con Andrea, Óscar hizo su papel de tentador con la Bratz murciana comiéndole la oreja y pintándole pajaritos en el aire durante la segunda temporada de 'La Isla de las Tentaciones'. Tras la ruptura de con Pablo y la incipiente muerte por achicharramiento de Rosito, Mayka lo intentó con el malagueño, pero no hubo éxito.
Óscar Ruiz guarda peor recuerdo de su segunda experiencia como tentador que de la primera: "Con Mayka siempre es lo mismo. Siempre dice que yo soy el malo, que soy un mentiroso, que vino a Málaga a dejarme y todo eso es mentira", ha comenzado diciendo desafiando a Mayka, que estaba tranquilamente observando el alpisteo entre el fucker y Andrea desde su asiento.
"Mayka me pintó una vida de cómo era ella que luego me di cuenta que no era así. En una semana me di cuenta de que no era la chica que conocí en esta isla. Te fuiste a un piso para acostarte con Pablo mientras que estabas conmigo", ha continuado Ruiz intentando quedar por encima de Mayka, que lo ha calificado como "una persona cínica, mentirosa, manipuladora" y que "tiene todo lo malo".
Óscar reconoce haber estado locamente enamorado de Andrea
El cachondo de Óscar nos ha intentado colar que ha sentido cosas muy fuertes por Andrea, cuando no ha sido capaz de dejar de ligar desde que puso el pie por primera vez en el reality, Hulio: "Recuerdo mi final con Andrea como uno de los momentos más bonitos de mi vida. Estuve muy pillado por ella, tú te ríes, pero llegué a estar enamorado de ella", ha confesado ante una incrédula princesita, que le ha recordado que fue a Mayka a quien le dijo que estaba enamorado en la villa y no a ella.
Andrea y Óscar se han ido encantados de compartir un Uber hasta la villa donde van a pasar las últimas semanas. "Roberto tiene que tener miedo cuando me vea contigo. Vamos a dormir en la misma cama, pero tú no te preocupes que yo no me muevo. Soy bueno en la cama, ¡eh! Durmiendo, digo", vacilaba el tentador a la tentada en el trayecto de vuelta que, por lo que sea, se les ha hecho muy cortito.
Al llegar a casa, Andrea se ha encontrado con un panorama de velatorio por el mal rollo que existe entre Fani y Julián, pero ni siquiera eso ha conseguido calmar su emoción por compartir sábanas con Óscar. Aunque el tentador ha sugerido que habrá que poner una almohada en medio a modo de barrera separadora por respeto al novio, la princesita tiene claro cuál es la barrerita que quiere ver elevarse entre ambos: "La otra vez también tenía novio", ha soltado a modo de declaración de intenciones, como dando a entender que quiere hacerse un remember.