'Viva la vida' casi le cuesta la vida a Emma García este fin de semana y no porque haya rozado el ataquito de ansiedad en uno de sus intentos de hacer callar a José Antonio Avilés, lengua viperina incluida. El dramita tuvo lugar en los exteriores de 'Mediaset' donde ella se encontraba para dar la bienvenida a Asraf Beno cual mayordomo telecinquero de la Preysler.
La presentadora se dirigía a abrirle la puerta del coche al churri de Isa Pi cuando el conductor de este, ni corto ni perezoso, arranca y deja a la chiquilla corriendo tras el vehículo sobre tus taconazos XXL que hacen que pierda el equilibrio y, por poco, se lleve a la boca el asfalto de Paolo Vasile para merendar: "¡Casi me matan!", exclamó Emmita a carcajada viva.
Imaginarse a sí misma tumbada de plancha en el suelo como si de una alfombra barroca typical abuelas se tratase, puso negra a la vasca que no dudo en espetárselo a sus compis de arriba: "¿Cómo se os ocurre dejarme ahí al sol?, y mi regidora muerta de risa en vez de ayudarme. Me dejaban ahí y casi me caigo".
Eso sí, este aparatoso traspiés no es la primera vez que le ocurre a la periodista de melena a lo Mufasa de 'El Rey León' ya que son varias las ocasiones en las que se ha marcado su propia adaptación de 'El baile de los cisnes' improvisada: "En mi vida no sabéis las veces que me he retorcido los tobillos, me ha pasado tantas veces que me han dicho que tengo los tobillos de chicle (...). Puedo hacer cosas muy raras pero aquí estoy. Me he pegado un susto que no veas...", ha sentenciado.
Emma cual bailarina de 'El cascanueces' - Telecinco