Desde que está enamorado, Kiko Hernández es una persona diferente a la que conocíamos. Ahora sonríe, comparte su vida en redes y no le importar hablar de amor que siente hacia su pareja. Es un hombre libre, desinhibido y seguro de sí mismo. Le gusta salir a cenar con Fran, acurrucarse en el sofá junto a él y sentir el calor del hombre al que siempre esperó.
Kikito es un hombre afortunado en amores, pero también lo es en el terreno económico. Desde su participación en 'Gran Hermano' allá por el 2002, Hernández no ha parado de facturar gracias a la televisión. En la última década, cuya labor en 'Sálvame' era prácticamente diaria, llegó embolsarse lo que sería una auténtica fortuna para el común de los mortales.
Además, se sabe que Kiko es un tío excesivamente ahorrador. No se deja llevar por caprichos ni fantasías, él controla sus ingresos y diversifica sus ganancias. Tiene varias propiedades en nuestro país y una de ellas es la que compró hace algo más de un año: el casoplón madrileño en el que reside junto a Fran y las niñas, Abril y Jimena.
El jardín de Kiko Hernández - Instagram
Se trata de un chaletazo de 700 metros cuadrados valorado en 2,5 millones de euros. Cuenta con siete habitaciones con sus respectivos cuartos de baño, un salón tremendo, un jardín de infarto y un porche idílico para disfrutar las tardes de verano. Además, tiene un espacio reservado para sus perros, Nicoleta y Draco.
Kiko Hernández y su perro - Instagram
Fotos: GTRES / Instagram Kiko Hernández