La docuserie de la Carrasco continua imparable e MitelePlus. Aunque Telecinco parece haber decidido eliminarla de su programación gratuita, lo cierto es que 'En el nombre de Rocío' ha resultado ser el espacio perfect para Rociíto. La pelirroja, sin pelos en la lengua, ha soltado lo más grande sobre varios miembros de su familia. Primero sentenció a Antonio David, después arremetió contra Raquel Mosquera y Ortega Cano, y ahora, la amiguísima de Jorge Javier Vázquez está dispuesta a detallar cómo era la relación de su madre con Fidel Albiac.
Durante años, los programas del corazón pintaron a Fidel Albiac como un auténtico monstruo. Hicieron ver que era él, y solo él, el culpable de que los Mohedano y la hija de 'la más grande' estuvieran distanciados. Albiac jamás abrió la boca, y su esposa, por aquel entonces enferma, tampoco dijo ni mú. Ahora, la madre de Rocío Flores está dispuesta a contar la verdad.
Aunque fueron muchos los que tacharon a Fidel de ser el malo malísimo de la película, ahora es la Carraco quien alza la voz para desmentirlo. Al parecer, la relación de Albiac con Rocío Jurado era más que buena. Ella lo quería, deseaba que se casase con su hija e incluso insistió en que lo hicieran antes de su muerte. Cuando la cantante enfermó, mantuvo una conversación con su hija y el entonces novio de esta que lo cambió todo.
Rocío Carrasco y Fidel Albiac - Gtres
"Mi madre estaba muy débil pero muy feliz. Se quedó mirándome a mi y, cogiendo la mano a Fidel, dijo: 'Rocío, tú no te pensarás que me voy a morir sin dejarte casada con este, ¿verdad?' En ese momento se me saltaron las lágrima porque ahí ya sabía o intuía lo que iba a pasar", relata la Carrasco en la primera parte de su documental, 'Rocío: contar la verdad para seguir viva'.
"Nos dijo: 'mañana os casáis aquí, llamo al Padre Ángel y estamos José, Fidel tú y yo y nadie más, y yo me voy tranquila", contaba Rociíto. Mañana, un nuevo capítulo de la hija de la tonadillera en MitelePlus promete revelar más detalles sobre aquella conversación que, al parecer, marcó un antes y un después en la historia del clan.