A sus 25 añitos, la novia de Kiko Matamoros ha dedicado gran parte de su tiempo a cambiar de imagen. Sus complejos la llevaron a buscar un físico de revista, y lo cierto es que lo tiene. A golpe de bisturí, Marta López Álamo ha conseguido implantarse la belleza artificial que tanto deseaba. Y sí, se ha gastado un verdadero pastizal en su gran cambio.
Marta siempre ha admitido ser fan de las operaciones estéticas, y no hace falta que lo jure. Es la viva imagen de la cirugía plástica. La primera vez que entró un quirófano fue para operarse la nariz. Tenía el tabique desviado y, ya de paso, aprovechó para para estrecharlo. Después, la churri de Matamoros se operó el pecho hasta en tres ocasiones hasta conseguir unas 'tetis' perfectas.
Marta López Álamo en el pasado
Además, la muchacha se colocó fundas en los dientes, recurrió al bótox para remodelar su cara y aumentó el volumen de sus labios. También es adicta a cuidar su piel a toda costa. Se ha sometido a todos los tratamientos habidos y por haber, y a través de Instagram, no duda en recomendar distintos trucos a sus seguidores.
Marta López Álamo - Instagram
Actualmente, Martita luce como una auténtica modelo de película y así nos lo muestra a diario a través de sus redes. Trabaja como 'influencer', desfila en ocasiones y recorre los mejores garitos de Madrid junto a su chorbo, el colaborador de 'Sálvame'.