¡Aquí huele a bodorrio! Anabel Pantoja y su churri están a puntito de darse el sí quiero y todo el país tiene la misma duda: ¿quienes serán los asistentes definitivos? Cualquier cosa es posible en el clan Pantoja, donde hoy adoran y mañana se odian. Hasta hace cuatro días, Kiko Rivera y su prima no se miraban a la cara, pero las tornas parecen haber cambiado. La que sigue en sus trece es la matriarca, doña Maribel, que continúa encerrada en Cantora entre rumores de una posible venta de la finca.
Anabel está más feliz que una perdiz. Al fin verá cumplido su sueño: casarse con 'El Negro' en su paraíso adorado, La Graciosa. La sobrinísima aseguró que será una boda íntima a la que solo asistirán los más allegados, pero claro, teniendo en cuenta que la familia Pantoja tiene movidas días sí y día también, ¿quienes asistirán al enlace? ¿el tito Agustín está invitado?
Por el momento, es posible confirmar la asistencia se Chabelita y Asraf. Estos dos se apuntan un bombardeo. Isa P pasa olímpicamente de todo conflicto familiar y su churri, con esto de que no tiene curro, lo mismo le da irse de boda que tirarse el día repanchigado en el sofá. El que también ha asegurado que acudirá al evento es Kiko Rivera. No sabemos si pinchará unos semitas o asistirá en calidad de invitado, pero no se perderá el bodorrio del año.
La encargada de desvelar la información ha sido Irene Rosales. La mujer del Panto-dj se ha ido de la lengua en redes sociales y ha terminado confesando que, por supuesto, ella y su familia estarán presentes en el día más importante de Anabel. Los que seguramente no acudan al enlace serán doña Isabel Pantoja Martín y su hermano Agustín, el malo malísimo del clan. Tal y como reveló la futura mujer de Omar, lo más probable es que no salgan de Cantora ni pa' ir al Mercadona. Bueno, eso sí, que les gusta mucho el marujeo.
Los que tampoco acudirán a la boda de la sobrinísima serán Alejandro Albalá y Sylvia Pantoja. Los ex supervivientes son enemigos íntimos de la novia y, por suerte o por desgracia, el Negro no tiene ni voz ni voto en la toma de esta decisión. ¡Já!