Los 6 capitulitos de la primera temporada de 'Soy Georgina' se han devorado más rápido que un plato minimalista del restaurante de Dabiz Muñoz de esos que te dejan el estómago y la cartera llorando. Nuestra Georgi nos ha abierto su corazón (y su vestidor deluxe) y ha hecho que vayamos con mil ojos cada vez que salimos del curro por si aparece un futbolista en su cochazo a liberarnos de esta vida mediocre.
'Netflix' no va a dejar pasar la pasta gansa que le ha generado los quehaceres a todo trapo de la churri de Cristiano Ronaldo y ya ha metido una cámara en cada "Luisvi" (terminología empleada por mega pijas de la talla de Carmen Lomana, Victoria Beckham o Tamara Falcó para llamar cariñosamente a sus bolsitos de 'Louis Vuitton') de la influencer para que no se les escape ni un detalle.
Uno de los temitas a tratar es el regreso a Manchester por parte de la family Cristiano-Rodríguez en el veranito de 2021 tras la firma del futbolista con el 'United' con el que veremos el nuevo casoplón de la argentina y como sustituye su 'Cola-Cao' de la merienda por la hora del té con pastas tipiquísima en esos lares. También acudiremos al fiestón de Nochevieja que organizó Ronaldo para despedir el año que dejó a la Preyler y a su bandejita de 'Ferrero Rocher' al nivel del subsuelo.
El baby boom va a estar muy presente en esta segunda temporada. Ver a Georgina en el parto de sus mellizos rompiendo la barrera del sonido bajo el gritito: "¡QUIERO LA EPIDURAL!" se merece un capitulito especial. Además, el 26 de noviembre llegó al mundo la hija de Ivana (sister de la modelo) a la que llamó Deva porque diva ya hay una y es su hermanísima.