La prima de Kiko Rivera ha regresado a 'Sálvame' con ganas de cachondeo. Más liberada que nunca y sin miedo a enfrentarse a Matamoros, su enemigo íntimo, la sobrinísima se ha reincorporado al prestigioso elenco de colaboradores y no ha dudado en rajar hasta de su propia vida sexual: lo hizo por primera vez a los 16 y no, no fue en un sofá de Cantora.
A diferencia de Marta Riesco, que hizo tucu-tucu en Cantora durante una misteriosa Nochevieja, Anabel no se estrenó en la finca de su 'tita'. Aunque ha confesado que también tuvo sus aventuras allí cuando era adolescente, escogió otro destino para dar comienzo a la que sería una extensa y muy placentera vida sexual.
Tras ser preguntada por Jorge Javier, la Pantojita ha largado lo más grande: "Yo estaba enamorada en ese momento, fue por la noche después de tomarnos algo, además en la habitación de al lado estaba mi amiga con su novio, y fue todo como las dos a la vez y la primera vez".
Aquella primera noche de pasión tuvo lugar en Fuengirola, y pese al buen recuerdo que guarda Anabel, ha confesado que aquello fue un verdadero desastre: "Sentí un dolor... fue horroroso", decía entre risas. "¿Y desde entonces no lo volviste a hacer?", preguntaba Jorgito. A lo que la churri de Omar Sánchez contestó: "¡Después no paré!".
Desde luego, menuda vuelta a la televisión ha tenido Anabel. Si sabíamos que la tía era un fenómeno irrepetible, su versión renovada es todavía más extrema. Es rápida, natural, chistosa y además se pega unos bailes que poco tardarán en desbancar al mítico 'chuminero' de la Lozano.