Alessandro Lequio no está dispuesto a que le fastidien las vacaciones. Ni la Obregón, ni la pequeña Ana Sandra, ni la madre gestante de origen cubano. Nadie. El colaborador de 'El Programa de Ana Rosa' solo busca paz, buen rollo y alguna carcajada. Y lo ha encontrado. En este momento, Lequio está de cachondeo en la costa gallega.
El revuelo mediático no tiene fin y el nombre de Ana Obregón retumba en cada programa de televisión, pero Lequio hace oídos sordos. Está sobrepasado por todo lo que se ha dicho estos días, y para colmo, tiene que asumir que se ha convertido en yayo. Sí, es duro, pero es real. El conde es abuelo de una niña cuyo padre está en el cielo, y asimilar eso no es tarea fácil.
Al parecer, Lequio nunca estuvo a favor de que Ana iniciase el proceso para traer una nueva vida al mundo. Intentó quitarle la idea de la cabeza, pero la bióloga no atendió a razones. Alega que fue la última voluntad de su hijo y no ha dudado en cumplirla. Alessandro, en cambio, jamás hubiera tomado tal decisión.
En cualquier caso, el italiano ha optado por relajarse y despejar la mente. A través de Instagram, nos ha mostrado su destino vacacional para esta Semana Santa: Galicia. Allí se encuentra junto a su mujer y un grupo de amigos, y a juzgar por sus caras, no parecen estar sufriendo.
Fotos: G-tres e Instagram