Iñaki Urdangarin ha encontrado su gallina de los huevos de oro: doña Cristina Clueca de Borbón. Hasta el momento, el ex deportista no era más que un expresidiario sin ahorros, sin curro y con escasas posibilidades de encontrarlo. Ahora, está a punto de convertirse en millonario, terrateniente, e incluso en estrella del pop internacional.
Y no, Iñaki no canta ni pretende hacerlo, pero su vida podría asemejarse a la de cualquier super estrella tras desplumar a doña Cristina. Si esta le concede sus deseos, Iñaki percibirá una pensión de 25.000 lereles mensuales con la que vivirá a cuerpo de rey. Además, la hija de don Juan Carlos pondrá dos inmuebles a su nombre y hasta pagará su seguridad privada.
Además de llenarse el bolsillo, Iñaki quiere mantener a los escoltas que le acompañan desde hace años. Son dos Policías Nacionales que viven pegados a él día y noche, y también se encargan de trasladarlo dónde desee en un coche financiado por el Ministerio, tal y como publica Vozpópuli.
Sin embargo, la presencia de aquellos dos Policías tiene fecha de caducidad, y está a la vuelta de la esquina. Cuando se haga oficial el divorcio, los escoltas serán retirados e Iñaki tendrá que contratar seguridad privada. Para ello, sabe que necesita, al menos, 3.000 euros al mes. Y efectivamente, doña Cristina parece estar dispuesta a dárselos.
Al parecer, Urdangarin no quiere vivir sin los dos gorilas que le protegen de los peligros del mundo exterior. Y por supuesto, adora que los mismos que velan por su integridad, le lleven y le traigan cuál diva del pop entre concierto y concierto.
Fotos: Gtre