El deseo de Juan Carlos no ha cambiado en los últimos meses. Quiere pisar suelo español, compartir tiempo con sus colegas y disfrutar de las clásicas tabernas que a todos nos vuelven locos. El emérito es un disfrutón en toda regla. A sus 85 tacos, todavía tiene energía para pegarse una buena comilona después de una jornada de cacería.
Él es así, no tiene remedio. Juan Carlos (alias el bribón) es adicto a la buena vida y en Abu Dabi no la tiene. Está aburrido, solo y desesperado por regresar a su país. Recibe la visita de algunos amigos empresarios, pero su verdadero deseo es volver a España y vivir en paz su última etapa. En julio, concretamente, tenía pensado viajar hasta Galicia para disfrutar de una competición de vela, pero Pedro Sánchez ha truncado sus planes.
Pedrito tiene la culpa. Fue él quien impuso las elecciones generales el 23 de julio, y por ese motivo, desde Casa Real han aconsejado a Juan Carlos que no se mueva del país árabe, asegura Informalia. La intención del padre de Felipín era montarse en su velero el día 8 de julio, pero no será a sí. Tendrá que esperar a que las urnas estén cerradas y los votos contados.
Al parecer, hay quien cree que la visita del emérito podría influir en el proceso de elecciones. En cualquier caso, en Galicia ya estudian aplazar la regata para que Juan Carlos pueda ponerse el mando de su barco junto a Pedro Campos, el gran amigo que siempre le acoge en su hogar.