Isabel II ya ha empezado a soplar las 96 velas de su cumpleaños esta mañana y se calcula que acabe sobre las 23:57 horas, eso si no le da un jamacuco antes de tanta actividad pulmonar. Sin embargo, hay algo que puede sentar peor a la reina de Inglaterra que los cerca de cien soplidos que tiene que llevar acabo: las últimas polémicas declaraciones con las que su nieto el príncipe Harry ha ambientado este día tan especial de la monarca.
Que el clan de los Windsor y el de los duques de Sussex (título al que podría ostentar Kiko Rivera por todas sus-ex que se han sentado en el 'Deluxe' ha hablar de él) están más enfrentados que los de la familia de Rocío Jurado es una realidad. Todo pareció calmarse con el té y las pastas que Meghan Markle y el pelirrojísimo príncipe Harry se tomaron con la reina Isabel II el pasado jueves en el castillo de Windsor. Un encuentro familiar emocionante tras un duro conflicto al más puro estilo 'El Diario de Patricia' (The Patry's Diary), no cabe duda.
No obstante, el nieto díscolo y rebelde de la abuelita más entrañable de nuestro imaginario desde la que cuidaba a Piolín ha vuelto a sembrar la discordia durante unas declaraciones a la NBC que dio durante su viaje a La Haya. Harry vino a decir que se está preocupando y "asegurando de que la reina Isabel II esté protegida y tenga a las personas adecuadas a su alrededor".
¡Oh! ¡Que lo lleven a las mazmorras! ¡Un nieto preocupado por su abuela! Más que cuestionado, lo que debería ser es un ejemplo para todos los nietos cuando la mayoría de ellos pasan de ellas y ponerse a jugar con el móvil cuando las pobres señoras le compran un 'Happy Meal'!
Unas palabras aparentemente inocentes, pero que la prensa británica ha calificado de "arrogantes, ególatras y delirantes", adjetivos que ha dedicado el 'Daily Mail' al ya madurito sujerente de Harry. ¿Quiere decir el duque de Sussex que Isabel II está más desprotegida que el chihuahua de una pija sin su correspondiente bolso de Louis Vuitton donde resguardarse? "La Reina no se merece esto en su cumpleaños", publica este mismo diario.
A pesar de que Meghan Markle y su marido fueran repudiados a patadas por la Royal Family por los comentarios racistas que recibían acerca de sus bebés (según comentaron a Oprah Winfrey durante su comentada entrevista), resulta que el que lo hace mal es 'Harry el sucio', como más o menos han venido a denominarle (con menos originalidad, por supuesto) los más castizos.
Esos castizos a los que seguramente les parecerá una obra de arte el posado de la reina con los dos caballos para celebrar su 96 cumpleaños como guiño al de su 70 aniversario. No se veía nada tan espeluznante desde la foto familiar de la familia real española con Juan Carlos I en el centro y todas las miradas puestas en la amputación de las fornidas y balonmaneras piernas de Pablo Urdangarín.