Pablo Urdangarin, el hijo guaperas de Cristina e Iñaki, ha vuelto a deleitarnos con su intachable educación. Una vez más, el muchacho ha respondido a la prensa con total naturalidad, sin gestos de incomodidad ni muestras de fastidio. Sabe que su vida interesa, al igual que la de sus padres y la del resto de sus familiares, y lejos de comportarse como un tirano ante las cámaras, muestra su mejor cara y responde a las cuestiones.
Muchas y muy buenas son las cualidades del Pablete. No solo es un crack en el balonmano, también lo es en la vida real, a pie de calle. Con los reporteros, el muchacho es humilde y generoso. Suele ser parco en palabras, pero siempre tiene algo que decir a quienes se interesan por su vida. Victoria Federica, Froilán y hasta su propia madre, doña Elena, jamás han demostrado tener ese talante.
En cualquier caso, centrémonos en el protagonista de este post. Él, Pablo 'el sexy', es quien ocupa ahora todas las miradas. Recién fichado por el Fraikin BM Granollers, ha posado natural ante los fotógrafos. Con ropa deportiva, mirada seductora y un saber estar envidiable, el joven no solo se ha dejado fotografiar, también ha hablado de su progenitores.
No tenía por qué hacerlo, pero cuando le preguntan, sabe que lo correcto es responder. "Mis padres están ilusionados, contentos y felices por mí. Saben que lo puedo hacer muy bien", ha comentado sobre Cristina e Iñaki, orgullosos de la trayectoria de su retoño. En lo que respecta a su nueva etapa deportiva, Pablo ha dicho lo siguiente: "Espero dar todo de mí, mucho trabajo, animar a todos mis compañeros y hacer grandes cosas. Ya veremos cómo se da la temporada", comenta, tal y como recoge Semana.
Fotos: Gtres