El emérito desea con todas sus fuerzas regresar a España. Son ya más de tres años de exilio y la soledad pesa. Juan Carlos necesita a su familia, a sus amigos y a sus cañitas bien tiradas. Extraña las cacerías, las comilonas con buen vino y las regatas que tanto disfrutaba junto a su amigo Pedro Campos. El emérito está cansado de vivir en Abu Dabi, pero la situación no cambiará a corto plazo.
Aunque desea afincarse en España y estaría dispuesto a hacerlo lejos de Zarzuela, desde palacio le niegan la entrada. Juan Carlos no puede regresar a su tierra de manera definitiva por motivos evidentes: la polémica reinaría de nuevo y la institución no soportaría otro huracán.
Por el momento, todo apunta a que el emérito continuará residiendo en Emiratos de manera oficial. Se desplazará hasta Ginebra en unos días por el cumpleaños de su nieta Irene y es posible que visite nuestro país dentro de poco, por su casa está en el país árabe. No hay discusión. Así lo requieren Felipe y Letizia, y Juan Carlos acata las reglas.
En cualquier caso, lo cierto es que Juanito no está solo en Abu Dabi. Además de disfrutar de la compañía casi diaria de Froilán, también recibe la visita de buenos amigos. Tal y como publica Informalia, el presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, y el empresario Arturo Fernández, han viajado en alguna ocasión hasta allí para cenar con el emérito.
Juan Carlos de Borbón - Gtres
Y con toda probabilidad, el abuelo de Leonor habrá abierto las puertas de su casoplón emiratí a muchos más colegas. El locutor Carlos Herrera, incluso, desveló ante toda España una de sus visitas.
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