La Infanta Elena es de las que tiran la casa por la ventana sin necesidad de que les toque la lotería. Tiene esa suerte, ese privilegio que la sitúa en lo más alto de la escala social y, evidentemente, le permite hacer cosas que el resto de mortales ni siquiera imagina. Con motivo de su 60 cumpleaños, la Infanta debió tirar de contactos y consiguió la celebración más especial.
Podía haber hecho una merendola en Zarzuela o un picnic en El Pardo, pero prefirió pasárselo pipa en familia en el Auditorio Nacional. Junto a su hermana y su tía Irene, Elena difrutó de 'El Mesías' de G.F. Händel bajo la batuta de Aarón Zapico.
Tal y como apunta Informalia, doña Cristina viajó desde Ginebra para estar junto a su hermana en un día tan especial. Victoria Federica, también presente en la celebración, estuvo especialmente cariñosa con su 'tita' durante el concierto.
Disfrutaron la representación desde un palco VIP, y cuando terminó, se trasladaron a una sala especial dentro del auditorio a la que, por lo visto, solo unos pocos pueden acceder. Allí, con toda probabilidad, picaron algo y se mojaron el morrito en champán del bueno.