Y si no que se lo digan a los enamorados, que para darse una vuelta por los Londres saludando al pópulo se puede hacer de miles de maneras distintas pero desde luego que desde un Aston Martin es de las mejores que hay. Si ya lo decía mi madre, que siempre ha habido y habrá clases en este mundo, que se le va a hacer. Y es que hoy Londres está de fiesta y sus gentes claman a la realeza que la Duquesa de Cambridge, Catalina (que ya no es Kate, un respeto señores), se pase saludando y enseñando a todos porque la cola de su vestido no es tan larga como todos esperábamos.
Tras la recepción que ofreció la reina Isabel II en su residencia oficial, El príncipe Guillermo cogió el volante, agarro a su esposa Kate Middleton y los dos con una gran sonrisa y él con otro uniforme, esta vez de color azul, se pusieron a saludar a la gente como sólo ellos saben (con ese gesto de la manita, sí, ese, el que todos sabéis).
Los duques de Cambridge salieron en el coche hacia Clarence House, residencia oficial del príncipe Carlos de Inglaterra, antes de tomar parte esta noche en otra recepción en el palacio de Buckingham...
... donde irán solo los allegados más cercanos y la creme de la creme. El resto tendrá que buscarse la vida por su cuenta.
Y sí, si alguno se lo estaba preguntando, en la matrícula del Aston Martin ponía aquello de 'Recién Casados', muy decoradito por los laterales con cintas a los costados y globos azules, rojos y blancos, los colores de la bandera británica y además mientras todo esto sucedía, sus compañeros de la Real Fuerza Aérea (RAF) sobrevolaban con un helicóptero amarillo de la unidad de búsqueda y rescate. Vamos, todo la mar de sencillito.
En Poprosa | Definitivamente, el beso de Kate Middleton y el príncipe Guillermo de real tiene bien poco (pero qué bonito...) Fotos | Gtres
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