Aunque parezca mentira, los miembros de la Familia Real también tienen complejos. Son de sangre azul y gozan de los mejores privilegios, pero de las vergüenzas no se libran. No hay dinero que venza el poder de los complejos, y si no que se lo pregunten a Letizia. La reina es una obsesa de la belleza y se esfuerza cada día para estar perfecta, sim embargo, hay algo que jamás podrá cambiar.
Tal y como publica ElNacional. cat, la Leti vive acomplejada por su altura. Desde niña quiso medir unos centímetros más, y ahora, en la edad adulta, hay ciertos gestos de la reina que evidencian que le gustaría ser más alta. Siempre acude a los actos que invaden su agenda con falda larga o pantalón, y el motivo parece claro: aparentar una altura que en realidad no tiene. Además, adora utilizar tacones a pesar de su enfermedad en los pies.
Si ponemos el foco en Leonor, todo parece indicar que ha heredado la misma vergüenza que su madre. Sofía es más alta que ella y eso no queda demasiado bien en las instantáneas. Es posible que la heredera al trono quisiera superar a su hermana en altura, pero eso es algo que jamás logrará cambiar.
Leonor, Sofía y la reina Letizia - Gtres
Madre e hija unidas por un mismo complejo. Reina y princesa, víctimas del mismo pensamiento que atormenta sus días: desean unos centímetros que ni tienen, ni tendrán.