El ex duque de Palma se ha convertido en la mayor preocupación para Zarzuela. Iñaki, resentido con la familia de su todavía esposa por haberle dado la espalda durante su etapa en prisión, ha decidido vengarse. Ahora es él quien tiene el poder. Es él quien maneja la información que tanto daño podría causar a la Corona en caso de ver de la luz. Iñaki, en definitiva, tiene la sarten por el mango.
Por increíble que parezca, cualquier petición de Iñaki será cumplida por la infanta y su familia. El mayor temor de la institución es ver a Urdangarin sentado en un plató, y con tal de evitarlo, están dispuesto a soltar la pasta que sea necesaria. El emérito habló con su hija y emitió la orden: a Urdangarin, lo que pida.
Pidió dos millones de euros a cambio de su silencio y 25.000 más cada mes a modo de indemnización. Solicitó que mantuviesen a sus escoltas, un par de pisos a su nombre y los traslados para visitar a sus hijos a coste cero. La infanta, instruida por su padre, aceptó el trato a regañadientes y firmó las cláusulas impuestas por su ex.
Ahora, a pocos meses de hacer oficial el acuerdo, Iñaki ha hecho una petición extra: quiere más 'money'. Al parecer, el ex deportista no tiene suficiente con el increíble pastizal que recibirá de la mujer ala que traicionó. Quiere más y así lo confirmó Galiacho: "Ha pedido más dinero y en un solo pago", sentenció el periodista, tal y como recoge ElNacional.cat.
Doña Cristina, perpleja ante la avaricia sin límites de su ex, lo consultó con su padre y este dio luz verde a la operación. Juan Carlos está dispuesto a cualquier cosa con tal de evitar que Iñaki abra el pico: "Él asumirá el coste extra que suponga", dijo el mencionado periodista.