Lo que rápido viene, fácil se va, excepto los michelines, que no hay manera de soltarlos. Así podría haber sucedido con la tranquilizante soltería que tan bien ha sentado a Paloma Cuevas tras que el padre de sus dos hijas, Enrique Ponce, la dejara por una chica más joven que, en vez de protagonizar anuncios de Ferrero Rocher (como hizo Cuevas), podría hacer los de los huevos Kinder...
El paparazzi y colaborador de 'Viva la vida' que arrebató el monopolio de 'compañero con alopecia y cabroncete' a Kiko Matamoros, Diego Arrabal, ha declarado estar segurísimo de que Paloma Cuevas ha comenzado a rehacer su vida con un señor de la 'Jet Set' (no podía ser de otro modo) de los de antes, de los que se creen que 'TikTok' es el cocodrilo que se comió un reloj en Peter Pan. Bueno, Peter Ponce en este caso, ya que el eternamente joven tiene intención de no firmar los papeles del divorcio 'Nunca Jamás'.
"Se trata de un hombre famoso que estuvo con una mujer famosa, que está separado y que tiene un hijo. Tiene entre 40 y 50 años (ya lo podía haber buscado en la Wikipedia su edad exacta, él que sabe de quién se trata), es muy famoso por su profesión y que es el número uno en su disciplina", aseguraban hoy desde 'Socialité' recogiendo las palabras de Arrabal, que también apuntó a que este hombre tiene cierta relación con la familia Real.
Ahora solo queda adivinar quien se esconde bajo la manta. ¡Bienvenidos a 'Mask Tinder'! ¿Quién habrá hecho match con la que ha decidido salir de la Cueva de la soledad?
De momento, atendiendo a esa descripción, podríamos descartar ya al fucker de Álvaro Muñoz Escassi dado que tiene dos hijos, a Josep Maria Mainat también porque tiene el triple o el cuádruple de la edad estimada del misterioso amiguito y a Aitor Ocio, por ejemplo, porque no se puede decir que sea el mejor de su disciplina... Bueno, eso si consideramos el fútbol su profesión, porque si contamos lo de posar en yates cual 'Action Man buenorro' como disciplina, ahí sí que no hay quien le gane...
Lo cierto es que, aunque Diego Arrabal asegura tener una fuente muy fiable y ciertas evidencias que lo corroboran, aun no existen fotos (al menos, que se hayan hecho públicas) que demuestren que Paloma ha vuelto a soltarse la melena en el ámbito del amor, tal y como ansían sus amigas que lo haga ('Diario Gol'): "lo que tiene que hacer es enamorarse, pero siempre me dice que cero patatero. No tiene ganas de nada", decía una de sus 'best friends' a dicho medio.
Kiko Matamoros se ha sumado a esta porra de famosos que podrían estar dándole al bacalao tostao' con Paloma: "he pasado una temporada en su centro de trabajo"... ¿Será su cirujano plástico? Pues no lo creo, porque se supone que era el mejor profesional haciendo su trabajo... A no ser que sea taxidermista, que entonces sí que lo está haciendo bien disecando al colaborador de Telecinco...
Arrabal, ansioso por desvelar la identidad de este misterioso gentleman, ha añadido otras pistas más muy reveladoras: "es muy atractivo", "ha tenido relación personal y profesional con Enrique Ponce" (muy fuerte, amigo de su ex), "de pelo oscuro y gafas" (¿Harry Potter? ¿Puigdemont? ¿Luis Piedrahita?) y "fue protagonista de uno de los momentos más importantes de la historia de España"... ¡Alfonso Merlos! Si el 'Merlos Place' no fue de lo más importante de nuestra historia, que venga Felipe VI en persona y me lo desmienta.
Bueno, ya fuera de cachondeos, me atrevería a decir que este misterioso madurito que podría haber ocupado el corazón de Paloma Cuevas y del que tanto habla Diego Arrabal es Ángel Villamor. Se trata del doctor que operó a Enrique Ponce tras la cornada que le destrozó la rodilla en marzo del año pasado, hecho que explicaría la pista que apuntaba hacia una relación personal/profesional con el torero. Pero claro, hasta que el paparazzi lo confirme, son solo conjeturas de las que ya muchos se han hecho eco en las redes.
Además, este traumatólogo es conocido por ser el cirujano del Rey, ese pedazo de profesional (el mejor de los mejores) que operó las dos caderas a Juan Carlos I (hecho histórico), que las tenía destrozaítas perdías después de todos los años que doña Sofía lo ha mandado a dormir al sofá (con tantas 'queridas' por el mundo... ¡Pues normal!)
Además, tal y como recuerda 'Vanitatis', el doctor Villamor (qué bien puesto tiene el apellido para Paloma) también intervino al Emértio de la columna y de su rodilla derecha, operaciones que explicarían su vínculo con la Casa Real.
Fotos | Gtres