Ya huele a cuerno quemado en España y República Dominicana parece que ya ha acabado de limpiar los ríos de rímel mezclado con lágrimas y pelos de peleas entre tentadores/as que ha dejado la grabación de la quinta edición de 'La Isla de las Tentaciones' que se estrena esta noche en Telecinco a las 22:00 horas.
Aunque ha sido poco tiempo el que la cadena ha dejado de margen entre las primeras promos y el estreno de 'La Isla de las Tentaciones 5', ya son muchos los fans acérrimos del formato los que se han percatado de algunas de las novedades del programa, como que esta vez la luz de la tentación se multiplica por cinco y con cinco colores diferenciados (cada uno con su significado, que iremos descubriendo a lo largo del programa).
Es por eso que a todos nos ha dejado un poco moscas que el casting masculino de los solteros de esta nueva edición tan solo cuente con ocho maromos chulitos playa y no con diez, como nos tenía acostumbrado el reality. Pues bien, la Gloria Serra del salseo, 'La Cuernis', ha conseguido descubrir el motivo de ello.
Según informa esta rastreator del mamarrachismo, Telecinco se guarda bajo la manga la sorpresa de que, por primera vez, dos gemelos/mellizos entran al programa para intentar levantarle las novias a los concursantes chicos. Estos serían Edgar y Brian, aunque en los vídeos promocionales solo aparezca uno de ellos.
Aunque sin duda el hallazgo más sorprendente es el que ha hecho 'La Cuernis' acerca del segundo concursante "fantasma" de la historia de 'La Isla de las Tentaciones'. La cuenta de Instagram asegura que el programa ha eliminado de su edición a un nuevo tentador por sus problemas externos a la grabación.
Su nombre es Jose y sigue los pasos de Carlos (no III, sino el extentador de 'La isla de las tentaciones 3'). Recordemos que este soltero, de los favoritos de Lola, fue eliminado de la edición de vídeo de los últimos programas tras que estallara la noticia de su presunta implicación en un abuso sexual en grupo. Finalmente, Algora fue declarado inocente, pero su nombre quedó manchado para siempre.