'La Isla de las Filtraciones' sigue dándonos contenido y, tras la pedazo de exclusiva que nos marcamos aquí en Poprosa.com con la revelación de una de las parejas que nos dará el salseo que nos merecemos en una de las nuevas ediciones de 'La Isla de las Tentaciones' que ya se están grabando en República Dominicana, ahora os traemos información bien fresca y mojadita de las aguas del Caribe sobre el brutal papelón que va a desempeñar el macizo de Álvaro Boix, ex de Rosario, próximamente en Telecinco.
'Cuarzo', productora del reality, no para de explotar el sexappeal que desprende Álvaro con sus aires de frutero con el que todos soñaríamos que nos rellenara la cesta de la compra (y lo que no es la cesta). Ese chaval que es capaz de hasta convertir las cejas depiladas en motivo de sueño húmedo ha vuelto a hacer de las suyas en República Dominicana, aunque esta vez como tentador repetidor cogiendo el testigo de Óscar y Andrea como trabajador con contrato de permanencia en su compañía telefónica y como agente del marraneo en 'La Isla de las Tentaciones'.
Tras probar suerte como tronista del fracasado 'Baila conmigo' que presentó Nagore Robles en Cuatro, Boix ha culminado su función como miembro VIP-RIL de la jet set del guarreo dinamitando una de las parejas de la quinta temporada. Según ha podido saber en exclusiva el portal 'Algo Pasa TV', Álvaro la lía y se convierte en el causante de la ruptura de Claudia Martínez, extronista de 'MyHyV', y su novio Javier Redondo.
Claudia Martínez y Javier redondo en la presentación de 'A través de mi ventana' (que será la tablet) - Instagram
Tal y como ha mantenido el medio citado, el alicantino provocará tantos celos en Javi que este se hará un Melyssa llegando a la otra villa con su abuelo fallecido como Google Maps (que según Pinto fue quien le guió hasta la casa donde estaba Tom Brusse) y le montará un chicken (pollo en inglés) a Claudia Martínez que ni el 'KFC'. Un show televisivo que no irá a ninguna parte ya que, según publican, la pareja se perdonará en la hoguera final y Álvaro volverá con el rabo entre las piernas (nunca mejor dicho).