Por lo menos el fracasado programa 'Esta noche gano yo' de Telecinco -que apuntaba maneras de ser la versión low cost de 'El Desafío' desde su prima promo- le ha dado una alegría a dos de sus concursantes: Carlo Constanzia y Michelle Calvó, que a raíz del concurso de habilidades de famosos han iniciado una bonita relación de actores en plena cresta de la ola.
El hijo de Mar Flores y la actriz canaria han sido cazados por las cámaras de Europa Press por las calles de Madrid pelando la pava como buenos enamorados: que si la manita, que si un beso de película... Incluso han llegado a intimar un poquito más con un plan solo apto para adolescentes salidos: día de cine.
Como dos buenos amantes del séptimo arte, Constanzia y Calvó se han pasado por el cine más cercano para comerse todas las palomitas durante los anuncios y comerse la boca durante el resto de la película. Dado el nivel de atención que puede tener una pareja recién estrenada en una ficción, seguramente escogieran 'Tadeo Jones 3' para no rayarse demasiado por haberse perdido el contenido del film.
La vida de película de Michelle Calvó
La historia de Michelle sí que es de película. Calvó es madrileña, aunque se siente canaria porque a los 7 años se trasladó a las islas. Se crió sola con su madre porque su padre regresó a Cuba, de donde es originario: “Mi padre era gay y mi madre lo sabía. Ella lo entendía y yo también, todo el mundo tiene que tener la libertad de amar a quien desee”, confesaba en 'Déjate querer' hace tan solo unas semanas.
¡Es oficial! ¡Son novios! ¡Un heterazo como Carlo no le lleva el bolso a cualquiera!
La actriz lleva años luchando por cumplir su sueño de despuntar en el mundillo de la interpretación. De hecho, Michelle confiesa haber pasado incluso hambre por cumplir su deseo. Amar es para siempre, Los Nuestros, Secretos de estado, Madres. Amor y vida, y en la película El club de los incomprendidos son solo algunas de las producciones en las que Michelle ha participado a sus 30 años tras dejar su carrera como parte de la selección española de vóley.