A raíz de la entrevista en 'Charlas con alma' (que parece el nombre de un gabinete de tarot de barrio) de Isabel Gemio a María Teresa Campos, donde la mítica presentadora de 'Sorpresa, sorpresa' le hablaba a chillidos a la matriarca de las 'Ca(m)pos del Salseo' como si estuviera sorda ("¡Awelaaaaaa!", le faltó decir), hizo gala de sus fuentes periodísticas más fidedignas (Wikipedia) y la llamó vieja sin despeinarse (le recordó que tenía ochenta años y le ha insistido en que se jubile), los de 'Sálvame' han destapado un caso amoroso inédito hasta el momento: el de Kiko Matamoros y la Gemio.
Kiko ha comentado que, antes de gustarles las 'Polly Pockets', le atrajo mucho Isabel Gemio durante un piscolabis que tomó con unos colegas: "Me parecía una mujer muy atractiva, la conocí en una fiesta con amigos y, en las distancias cortas, me pareció una mujer super amable de verdad", ha comenzado diciendo.
Ya con estas declaraciones se intuía un secreto a voces, un pelar la pava típico de los años dorados de la tele propios de un capítulo de 'Cuéntame', por eso Jorge Javier le ha hecho a 'Killmoors' (Matamoros en inglés) la pregunta que todos nos estábamos haciendo, "¿Tú has tenido algún tonteo con ella?"
Kiko ha empezado a echar las luces largas, a dar rienda suelta a una sonrisilla nerviosa poniendo cara de... Bueno, de nada, porque con tanto bótox apenas puede cambiar de expresión, pero se deducía una carilla de pillín, de fucker de los que dicen "el que tuvo, retuvo" y esas cosas de suscriptores del canal de la seducción de Julio Iglesias.
"Cuando la conocí a finales de los ochenta, fíjate si ha llovido (y nunca mejor dicho que hoy, que esa tal Filomena nos tiene empapados a toda España), ya era conocida como Isabel Gemio, era socia del Loco de la Colina y digamos que la cosa no fue a más, pero podía haber sucedido", ha continuado Kiko Matamoros, poniéndonos en contextos de qué se cocía en aquella época para los que ni siquiera estábamos aun en las mentalidades de nuestros padres.
Jimmy Jiménez Arnau, tal y como han recordado Gema López y Mila Ximénez, también tuvo su aquel con la Gemio, aunque fue "en el año noventa y algo". Matamoros ha explicado que los motivos por los que no fue a más con Isabel fueron dos. El primero, una relación estable (quién lo diría) y el segundo, respetar el juramento solemne de los amigos: "nunca te tirarás al amor profundo de tu pana (colega, en idioma millennial)".
"A mí me pareció una mujer muy atractiva y guapa, con una conversación muy interesante. Parece ser que ella después mostró interés por mí entre los amigos comunes y volvimos a coincidir, lo que pasa que yo tenía por entonces una novia que se puso celosa", ha comenzado diciendo incidiendo en el primero de los motivos.
Pero Isabel Gemio no se daba por vencida, como en sus preguntas mezquinas a la Campos en su asalto al 'Campitolio', así que insistió, según cuenta el colaborador, en verle: "le preguntaba a gente de la profesión por mí y tal, coincidimos luego en Madrid, pero no pasó nada porque yo estaba con una chica entonces", se ha excusado Kiko como si lo de la fidelidad fuera el 'Padre Nuestro' para él.
Pero atención a la segunda de las razones, ¿quién es esa amistad a la que respeta tanto como para pasar de uno de sus ligues? Pues sorpresa, sorpresa... ¡Chelo García Cortés! Matamoros ha asegurado que le llegó el rumor de que Chelo estaba locamente enamorada de la Gemio y que, "de haber tenido algo con ella, que ya he aclarado que no, me dijeron que a Chelo le fastidiaría mucho", ha dicho provocando el hartazgo habitual que le producen los comentarios de Matamoros sobre las famosas a las que, supuestamente, le hubiera gustado tirarse (privilegio exclusivo de Marta Roca y Bárbara Rey, por supuesto).
Chelo, nostálgica, viendo su álbum de fotos románticas junto a la Gemio