Nuria Roca y Juan del Val están a un paso de amordazar a Trancas y Barrancas en el cuarto de la escoba de los estudios de 'El Homiguero' para tomar sus lugares bajo la mesa.
El matrimonio de moda ha adquirido ya tal confianza con el presentador que se han hecho la de los abuelos cebolletas con los nietos enseñándoles fotos del día de su boda, delante de toda España, a Pablo Motos, Cristina Pardo, María Dabán y compañía durante la tertulia streamer de puretas.
Juan del Val, tan cascarrabias como Kiko Hernández y tan omnipresente en la tele como Kiko Matamoros (tiene lo mejor de cada Kiko), se proclamó anoche hater oficial (pa' variar) de las bodas temáticas, que "son una vulgaridad", y de todas en general: "cuando me invitan lo paso mal. No me hacen ningún favor".
Nuria Roca, que nos enseña cada día lo buena idea que es tener a la mujer al lado de todo tertuliano cuñaísta que le ate en corto (deberían patentarlo, convertirlo en obligatorio en la tele), ha cortado a su marido asegurando que su enlace también fue para echarles de comer aparte, tan sólo hay que ver las fotos del día que, hace ya 22 años, Juan del Val y la presentadora se dieron el sí quiero.
En esta foto, Juan del Papel Al Val derrocha felicidad en lo que siempre recordará como el día más importante de su vida. Con cara de estar siendo atracado por siete encapuchados de mono rojo y careta de Dalí, el colaborador agarraba más fuerte a su mujer que a los sobres de dinero que le iban entregando sus invitados.
Hablando de invitados, Juan y Nuria Inodoros Roca han compartido la original idea que se les ocurrió, después del brindis seguramente (a nadie sobrio se le puede pasar por la cabeza eso): apagar las luces para que los asistentes "perdieran la vergüenza" y lo dieran todo desde el minuto uno en la pista de baile. Fundamental porque, como todo el mundo sabe, si una boda no acaba con el 30% de sus invitados con la corbata en la cabeza, es un fracaso de evento.
"Todo el mundo estaba a gusto y, de repente, empezó el baile, y en el baile la gente se bloquea. Entonces yo le dije al chico que estaba allí: 'Quita la luz', y me dijo: 'La bajo un poquito', y yo le respondí: 'No, no la bajes, ¡quítala entera! Que la gente se choque'", y así es cómo explicó Juan del Val anoche el origen del intercambio de parejas y los garitos swingers en su boda como epicentro histórico del guarreo.
Casi 300 invitados bailando el 'Saturday Night' y 'La Macarena' a oscuras, imaginaos como sería eso. "A ver la gente se lo pasó muy bien, pero los mayores decían: 'Esto está un poco oscuro'", ha añadido Nuria Roca asegurando que el plan del escritor tenía alguna que otra laguna, sin especificar si alguno volvió a casa en ambulancia en vez de en taxi por un dislocamiento excesivo (de empinar el codo) o algún esguince.