Iker, Sara, sólo os pedimos una cosita: no acabéis como Bisbal y Chenoa, por favor

Iker, Sara, sólo os pedimos una cosita: no acabéis como Bisbal y Chenoa, por favor
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Este verano Iker Casillas y Sara Carbonero están en más revistas del corazón que Camela en verbenas de pueblos. Y es que España está dividida en dos bandos, como cuando rompieron Bisbal y Chenoa: están los que piensan que la relación va sobre ruedas… y los que opinan que las ruedas no tienen freno y un poquito más adelante hay un precipicio.

Tanto se dice, tanto se cuenta, que ya no sabemos qué creernos. Aunque, viendo lo que se hablaba, fue el propio Iker el que decidió dejar las cosas claritas: “Con la situación que hemos tenido, en las últimas semanas igual no he estado con Sara todo lo que debería, y eso da lugar a especulaciones”, dando a entender que su matrimonio sigue viento en popa.

Piso Iker Casillas

Aunque claro, Iker, luego te compras un pisazo de 3 millones de euros a tu nombre… Y nos haces dudar. Que la fachada del piso no es que parezca tampoco un palacio nazarí, pero cuenta con 300 metros cuadrados útiles y amplios balcones que dan al Templo de Debod. En una calle, la del Pintor Rosales, en la que, desde su terraza, de un grito puede saludar a sus vecinos Eugenia Silva y Alfonso de Borbón.

 

Que sí, que la pareja se casó en régimen de separación de bienes... pero aún así nos resulta un poco extraño. Más aún cuando en 2014 compraron a Lydia Bosch y Alberto Martín su casa en La Finca, una urbanización a las afueras de Madrid en la que sólo puedes entrar si el director de tu banco se sabe personalmente tu nombre y tus dos apellidos.

Aunque tampoco queremos pensar mal con el porqué de este piso, que ya decían nuestros padres que lo inteligente es invertir en propiedades. Quizás Casillas sólo esté pensando en convertirlo en un Airbnb para sacarse un sueldo extra.

Ya habrá tiempo para pensar… Mientras, ellos a lo suyo, descansando con sus hijos unos días en el pueblo del ya ex-portero. Y, la verdad, se les ve felices... ¿Pero tanto como hace 10 años?

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