Si la cuarentena tuvo algo bueno no fue el aprender a beber vinos en la soledad de tu cuarto, ni me refiero a los memes del papel higiénico, a la almendra mejor atragantada del mundo (la de Fernando Simón) o a esa serie turca a la que te pudiste enganchar en secreto, sino fue la llegada a nuestras vidas del 'Merlos Place', un acontecimiento que contaremos a nuestros nietos.
Un caso digno de un programa de Jordi Évole, cuatro cientos de 'Sálvame' y una pregunta en el examen de historia de selectividad del año que viene (causas, desarrollo y consecuencias, dos puntos), gracias al cual se destapó la infidelidad del periodista Alfonso Merlos a la ex gran hermana Marta López.
Ahora, la revista 'Semana' ha destapado que la pareja que se distribuía a la perfección el primer plano y el lejano durante las videollamadas ha roto su relación tras cinco pedazos de meses, curiosamente cuando ya nadie se acordaba de la existencia de estos dos seres vivos que nacieron, crecieron, se reprodujeron (haciendo trás trás con sombrero a espaldas de Marta), se reprodujeron (en los medios), se reprodujeron (con más trás trás por detrás, que es como le gusta hacer las cosas) y murieron (como foco mediático).
Alfonso Merlos, ese hombre con un mentón que parece haberse comido una flauta travesera y con un peinado de cani farrullero engominado con la bilis de un caimán, va a tener que comprar la revista de la 'Semana', porque es donde Alexia, que ahora juega a ser influencer (muy original, lo nunca visto en una pseudo famosa), se ha quedado tan pancha hablando en exclusiva de su relación rota, como la de Willy Toledo con la interpretación. ¿Quién se quedará con el perro? Es lo único que me preocupa...
El caso es que ahora el Merlos Place puede tener segunda temporada, incluso un plot twist a la altura del de 'Los Serrano' e incluso sin necesidad de segundo confinamiento, lo digo por si desde Moncloa están muy aburridos y quieren carnaza, aclarar que no es necesario para que estos calenturientos casi cuarentones se pongan manos a la obra con una nueva trama Shakespiriana. Sobre todo Marta López, que ya hemos visto que es capaz de lo que sea por su minutito de gloria "porque no tiene miedo".
El mantra que se repite Raquel Meroño al coger las cosas del horno sin manoplas #MCCelebrity pic.twitter.com/8VLhtiRbJK
— Darío del Alcázar (@DarioDelAlcazar) September 23, 2020
