Qué bonito es el amor, más que nunca en primavera
Pues sí, que no dábamos un duro por estos dos (bueno, y no es que lo demos mucho aún), pero la relación de Justin Bieber y Selena Gómez va viento en popa a toda vela, que ya compran los sujes picantones a dúo y se dan arrumacos en galas televisadas.
Y claro, lo mejor de ser semi-adolescente y estar forrado es que si te vas de vacaciones, no te vas de campamento cutre, sino que te cojes un avión y te vas a Hawaii, que es más guay. Pero analizada la foto sólo hay una conclusión posible: ¡Justin tápate! Esa sería la primera medida a tomar para evitar daños mayores, que algo de repelús da tan churrurío y blancurrio. Y luego que se lo pasen a mi madre y le haga unos cocidos para conseguir que coja algo de cuerpecito.
Que no vamos a negar que el muchacho tiene indicios de usar alguna pesa o algo porque asoman como unos musculillos, pero de momento es que parece una lagartija con flequillo a punto de romperse. Ideal, eso sí, cogidito de la mano de su novia, que son los dos tan tiernecitos… Pero bueno, es que aún nos tiene que crecer el niño.
Foto | GTres
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