Algunas celebrities en lugar de estilista tienen a su lado a alguien que los odia a muerte y les desea todo tipo de perfidias. Por ejemplo, Avril Lavigne. Porque una cosa es ese estilo rockerillo punk que llevaba al principio y que al menos era diferente al rollo del resto de las chicas del pop, y otra muy distinta que aparezcas por la calle con la teta al aire y un mono de camuflaje que el común de los mortales no se pondría ni en Carnaval.
Vayamos por partes. Que sí, que cada uno puede vestir como le salga del toto, pero el límite del buen gusto sigue existiendo. Y Avril se ha hecho pipí, popó y todo tipo de fluidos encima de él. El mono le sienta como un tiro porque además ella no es muy alta, así que el resultado es espantoso.
Pero la guinda la pone ese sujetador de tachuelas que vemos porque se ha sacado un pechete al aire y lo lleva ahí, bien punkorro, para disfrute del personal. Y justo cuando creías que no podía mejorar, echas un vistazo a ese maquillaje en rojo con las rayas doradas en el pómulo y te da un parraque. Vaya horror. Y es que vale que no seas una conformista mainstream, pero de ahí a ir hecha un adefesio hay un trecho, maja.
Vía | Huffington Post Foto | GTres En Poprosa | Y llegó la exclusiva "más negra" de la boda de Avril Lavigne En Poprosa | Avril Lavigne vuelve a dar el sí, quiero: ¡y esta vez parece que va para largo!
Ver 2 comentarios