Y darle miedo es poco, que el pobre crío rompió a llorar desconsoladamente cuando el día de su cumpleaños, su madre con toda la buena intención del mundo, le presentó en casa a todo el elenco de Barrio Sésamo con la intención de sorprender al crío y hacer de su cumpleaños algo especial y mágico según palabras de la propia Christina.
Al cumpleaños habían asistido Gwen Stefani y sus dos hijos también, familiares y amigos y Max no podía quejarse de estar mal rodeado. Y no lo hizo, porque estuvo con una sonrisa en la cara durante toda la fiesta. Eso sí, cuando hicieron su aparición estelar los personajes y, sobre todo, cuando lo hizo Coco, a Max se le desencajó la cara y la sorpresa se convirtió en un berrinche de miedo que no quedó otra opción que mandar a todos los personajes a paseo si querían tener la velada tranquila.
Al final, consiguieron engañar un poco al crío y cuando vio que nada más eran hombres disfrazados, se le pasó el mal trago. Y como para no hacerlo, que la madre les había contratado a ellos y a un camión de bomberos decorado para la ocasión, donde Elmo cantaba y tocaba palmas y un hombre les hinchaba globos de colores a los más pequeños. Así cualquiera se pierde la fiesta de cumpleaños…
Vía | Hola
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