O Lady Gaga cada día escala puestos más altos dentro de la moda con su estrafalario estilo y su toque algo desmadejado a la hora de conjuntar, probar y ponerse cosas en el cuerpo, o que la directora creativa de la revista Vogue también ha sucumbido a los obsesivos encantos de Lady Gaga y ha decidido incluirla en un reportaje. Sí, la mismísima Lady Gaga ha conseguido escalar altas montañas, pero de ahí a coronar la Vogue, creo que hay un gran paso.
La mismísima Annie Leibovitz ha sido la encargada de fotografiar a Lady Gaga en este reportaje en el que la cantante literalmente nada a sus anchas. ¿Por qué? pues porque la cantante ha sido la elegida para un reportaje inspirado en el cuento de Hansel y Gretel pero visto desde una perspectiva algo más alocada, a lo Tim Burton. Y eso a Lady Gaga le viene que ni pintado.
Y efectivamente podemos ver que la rubia se desenvuelve a sus anchas. Ataviada con unos fantasías muy sugerentes, interpreta el cuento de Hansel y Gretel acompañado de dos modelos bastante conocidos: Lily Cole y Andrew Garfield, que son los hermanos Hansel y Gretel en esta sesión de la fotógrafa, a la cual, todo sea dicho, desde hace tiempo está bastante obsesionada con la factoría Disney y sus cuentos.
Y efectivamente Lady Gaga hace de bruja. Con el pelo blanco, cardado, y muy maquillada, interpreta su propia muerte, cocinada por los hermanos. Un toque diferente para una sesión muy artística e infantil en el que Lady Gaga aporta su particular nota de excentricidad, eso sí, vestida de Alexander McQueen. Así cualquiera se empolva la nariz y hace de bruja...
Vía y fotos | Vogue
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