Algunas como Miley Cyrus se escandalizarían al oír semejante barbarie, después de haber tenido un cumpleaños de ensueño con toda la tropa Disney, pero el hecho es que Carla Bruni, la primera dama de Francia, ha iniciado en Brasil los festejos de su 41 cumpleaños con una visita a favelas de Río de Janeiro, donde unos 50 niños pobres la homenajearon cantándole Happy Birthday a ritmo de samba.
Los niños, además le regalaron flores y una camiseta como detalle y regalo de cumpleaños. Después de esto, Bruni tenía todo un programa de cumpleaños la mar de sabrosón: un desfile de moda organizado por organizaciones no gubernamentales dedicadas a formar modistas y modelos en las barriadas de la ciudad en la que una de las aspirantes a modelo regaló a la primera dama francesa un vestido rojo, producido por el proyecto comandado por la ONG Moda Fusion. Después asistió un espectáculo musical protagonizado por Charles Aznavour y por el cantautor y ex ministro brasileño de Cultura, Gilberto Gil, con ocasión del lanzamiento del Año de Francia en Brasil, a iniciarse en abril de 2009, acompañada de su marido, eso sí.
Al finalizar todos los festejos, Carla Bruni quedó totalmente liberada de sus menesteres como primera dama y pudo dedicarse a su familia, que imagino que también le apetecería, porque un cumpleaños es un cumpleaños, por muy animado que te lo pinten (o preparen en este caso).Es lo que tiene estar casada con el presidente de Francia, querida.
Vía | IBLnews